extendido a lo largo de la segunda quincena del mes de junio. Los partidos se jugaron en las pistas de tenis del polideportivo municipal, disputándose la final en la pista número 1 del complejo. El vencedor del campeonato fue Silvestre Román, que derrotó a Andrés Redondo por un doble 6-3. El encuentro fue arbitrado por el organizador y monitor Jesús Molina y se caracterizó por un juego conservador del ganador, que trató de defenderse de los golpes más agresivos de su oponente, Redondo, que no tuvo su día, viéndose perjudicado por las fuertes rachas de viento mientras que el campeón fue más regular practicando un juego más defensivo y aguantándole el peloteo a su oponente en una mañana en la que el viento jugó en contra de los finalistas. En este partido, la conservación del saque no fue el factor decisivo sino la seguridad y fiabilidad de los golpes. La persistencia en los errores de Redondo fue la clave decisiva del resultado, que se decantó con claridad para el vencedor, Silvestre Román. El vencedor del torneo quiso hacer un llamamiento para que el tenis no desaparezca de las pistas arcenses “porque es un deporte sano, no hay contacto físico, ni mucho menos agresividad entre los contendientes. La liga local que quiere fomentar Jesús Molina va ayudar bastante a los jóvenes a que practiquen un deporte sano y bueno y que dejen de pensar en otras cosas que no les aportan nada bueno a sus vidas. Por eso animo a todos a que nos apuntemos a la liga que va a organizar Jesús”. Por su parte, el subcampeón, Andrés Redondo, expresó sus quejas por el estado de deterioro y envejecimiento de las pistas afirmando que “se puede hacer una pequeña mejora de las instalaciones ya que hace mucho tiempo que no se les hace nada y aunque el tenis lo practique un número muy reducido de deportistas, es necesario remodelar las pistas dentro de las posibilidades de la Delegación para que se animen más practicantes”. En cuanto al partido en sí reconoció que su estilo de juego es “más agresivo que mi rival lo que me hace cometer más errores y perder muchos puntos que terminan pasándome factura”.
En la final B se impuso Víctor Guerrero a Sergio Montero por 6-0 y 6-3. Guerrero declaró que “el torneo ha estado bastante bien y a ver si podemos potenciar este deporte, que le gusta a bastante gente y a la que también le gustaría participar en este tipo de torneos. Últimamente se están poniendo de moda otros deportes, como el pádel, pero el tenis le gusta a mucha gente. A mí me ha gustado desde siempre. Ahora no he podido jugar mucho, pero espero seguir interviniendo si continúan celebrándose competiciones”.
El organizador del torneo, el monitor Jesús Molina, hizo entrega de los trofeos a los finalistas y afirmó que “ha sido el mejor torneo que se ha hecho en Arcos porque los anteriores eran de escuelas deportivas y de menos nivel. Han participado todos los tenistas de Arcos de dentro y fuera de la escuela y el nivel ha sido importante. Hemos hecho un cuadro de 32 jugadores de los que solamente han faltado cuatro. También hemos tenido la satisfacción de la entrada de patrocinadores, que han aportado unos premios modestos pero que suponen un incentivo más y esperemos contar con más ayuda en años venideros y mejorar también las instalaciones”. También tuvo palabras de elogio para el ganador, Silvestre Román, porque “es un deportista que trata de ayudar al contrario y una gran persona”. Recordó su etapa como jugador y entrenador en Catalunya y Baleares “donde el tenis está muy arraigado, por lo que hay que aprender del que lo hace bien y tiene más experiencia que nosotros. Allí el sistema de liguilla está muy consolidado en todos los clubes porque ayuda a que el tenis se practique con regularidad. A un jugador que no puede jugar semanalmente por cualquier motivo se le programa sus partidos a la hora y el día que pueda, igual que se ha hecho con este torneo, llamar a todos los participantes para ponerlos de acuerdo y facilitarles que jueguen como sea, de ahí que el tenis en Arcos necesite todavía un empujón y hay que dárselo entre todos”.
El delegado de Deportes, Raúl Lozano, salió al paso de las observaciones críticas de uno de los tenistas participantes, a las que consideró como de “constructivas”, dándole la razón al jugador, “por lo que nos tenemos que poner a trabajar desde este mismo momento para mejorar las instalaciones municipales en cuanto sea posible. Es verdad que se atiende un poco más a otros deportes por su mayor volumen de participación, como el fútbol, que tiene a 800 o 900 niños, pero también es verdad que hay que atender un poco más al tenis desde la Delegación y vamos a mejorar las instalaciones”. Reivindicó el que se hubieran jugado más de veintitantos partidos en esas mismas pistas “y un torneo en el que nadie ha pagado inscripción y a nadie se le ha cobrado por el uso de las instalaciones. En cambio, desde la Delegación se han dado todas las facilidades del mundo para que los deportistas pudiesen tomar parte en el torneo. Esta es la primera piedra para poner en marcha la liga que proyecta Jesús Molina y trabajaremos para instalar dos redes nuevas. No soy el delegado de fútbol, soy el delegado de Deportes y está bien que de vez en cuando nos den una baño de realidad y aceptarlo de esa forma, que para eso somos políticos, para corregir las necesidades en la medida de nuestras posibilidades”.