Tras la marcha de Antonio Roldán a la viceconsejería de Turismo y Comercio de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Bermúdez aceptó, a petición de sus compañeros de Izquierda Unida en Conil, el reto de sustituirlo. Una responsabilidad que asume porque es un “orgullo ser alcalde de mi pueblo”. Bermúdez se enfrenta ahora a la época postvacacional y al desempleo que acarrea en una villa centrada sobre todo en el turismo. Sobre los proyectos que tiene sobre la mesa, sobre el desarrollo turístico, sobre el empleo y la crisis económcia y sobre sus relaciones con la oposición, versa la conversación que les ofrecemos en las siguientes páginas.
—¿Cómo valora estos primeros meses al frente de la Alcaldía de Conil?
—Con bastante trabajo, intentando ponerme al día de todas las cuestiones porque, como es sabido, antes estaba al frente de las delegaciones de Medio Ambiente y Servicios Públicos, y tocaba sólo esta parcela aunque estaba informado de lo que ocurría en las otras concejalías. Sin embargo ahora, tengo que estar pendiente de todas y cada una de las delegaciones puesto que, por decirlo de alguna manera, todo pasa por el alcalde. Han sido unos meses para recopilar toda la información y para conocer todos los problemas y dificultades. Para mi es un reto, pero es un orgullo poder ser alcalde de tu pueblo, además los compañeros me han ayudado mucho. Asumo este reto y la responsabilidad de trabajar por Conil, que es por lo que estoy aquí, y por lo que estoy en política.
—Los primeros meses de su mandato han coincidido con el verano, ¿qué tal ha ido?
—El sector turístico es prácticamente el que nos está salvando, no sólo a Conil, a la provincia, sino prácticamente a todo el territorio nacional, y aquí hemos realizado un balance muy positivo del verano. Los índices de ocupación hotelera colocan a Conil en cabeza en la provincia. Nos han visitado muchos turistas, como ya es habitual, pero en lo que sí coinciden todos aquellos que trabajan en el sector turístico es que ha bajado el poder adquisitivo de los que nos visitan, algo lógico si tenemos en cuenta la situación económica que atraviesa todo el país, con cinco millones y medio de parados, y con recortes en muchos sectores. Pero en líneas generales el balance es positivo, puesto que a pesar de la coyuntura económica nuestro modelo turístico está resistiendo. Hay otros modelos basado en aglomeraciones en espacios concretos que sí se están resintiendo por culpa de la crisis. Sin embargo, el modelo turístico que tenemos en Conil creo que está dando sus resultados. Si no fuese por el verano, seguro que lo estaríamos pasando mucho peor. Se nota en los índices de paro, que nos dice que la mayoría de las personas encuentran un trabajo en verano… y luego lo que se gana el verano en invierno también se nota cuando comienzan a gastarse esos ahorros en el pueblo. El verano nos salva.
—¿Su idea es mantener el modelo de desarrollo turístico que se implantó en el municipio hace unos quince años?
—Hubo un plan estratégico que definió qué es lo que se quería hacer en Conil. Aquello significó una apuesta fuerte que se realizó cuando Izquierda Unida entró a gobernar en la localidad, y que está dando sus frutos. Por lo tanto hay que seguir en esa línea, hay que seguir mejorándolo pero también defendiéndolo. Hablamos de un modelo basado en el respeto al entorno natural, en la conjugación de hoteles grandes con pequeños comerciantes que poseen pequeños hoteles y restaurantes, ya que todos juntos generan una inercia que permiten que esto funcione como una villa turística donde las señas de identidad del pueblo no se pierden. Hablamos de un modelo diferente, pues también influye en lo social… la mejoras que nosotros realizamos en la localidad repercuten en la calidad de vida de los ciudadanos y también en los turistas.
—Pero el desempleo sigue siendo el principal problema ¿no?
—Claro, es el gran problema, es un drama que estamos sufriendo los alcaldes más que ningún otro porque lo padecemos día a día. Ahora ha vuelto a subir el paro tras el verano. Recibimos a personas que lo están pasando realmente mal, que no llegan a final de mes y que incluso tienen problemas para comer. La situación es dramática. Desde la Administración Local intentamos hacer todo lo posible pero es complicado si desde el Gobierno Central no se incentiva, no pone en marcha planes de empleo y todo lo que hace está dirigido a reducir el déficit, a recuperar la economía de los bancos, pero no hacen nada para recuperar la economía de los ciudadanos. Desde nuestros Servicios Sociales cada vez contamos con una mayor demanda y luego también estamos en coordinación con Cáritas que aquí en Conil, está realizando una magnífica labor. La situación es complicada, cada vez vienen más vecinos al Ayuntamiento mientras que nosotros llamamos a todas las puertas aunque casi todas estén ahora mismo cerradas.
—El Ayuntamiento de Conil está apoyando a los vecinos que se encuentran acuciados por órdenes de embargos de vivienda… ¿en qué sentido?
—Quizás sea importante saber cuál es la idea global. Lo que pretendemos nosotros como Ayuntamiento, cuando nos hemos declarado Municipio contra los Desahucios, es ponernos de un lado. Y el Ayuntamiento está del lado de aquellos que lo necesitan, no estamos del lado de la banca. Por lo tanto, el ciudadano recibe un apoyo importante, y el banco a la hora de llevar a cabo el desahucio, va a tener muy en cuenta cuál es la posición del Ayuntamiento. El banco se va a encontrar con un problema como es el Ayuntamiento que incluso se va a manifestar con el vecino en cuestión. En segundo lugar, damos asesoramiento jurídico a los afectados y en tercer lugar, actuamos como mediadores con los bancos, entablamos negociaciones que ya han tenido algún éxito.
—También el Ayuntamiento de Conil se ha involucrado en otro asunto como son las participaciones preferentes…
—Esto ha sido una gran estafa que también ha afectado a vecinos de Conil. Nosotros desde el primer momento hemos estado con ellos, incluso se aprobó una moción en el Pleno para poder ofrecerles asesoramiento, algo que se está haciendo. Nos consta que se están solucionando algunos aspectos, no todos, pero sí que hay negociaciones de las cuales están saliendo algunos acuerdos. Hubo manifestaciones a la que asistió el equipo de Gobierno. Nosotros lo que queremos es que se solucione, porque no entendemos que sí haya dinero para la banca y no para un ciudadano que ha perdido sus ahorros. Por eso cuando en este país algunos dicen que no hay justicia, hay veces que tienen razón.
—Ahora se están dando a conocer los Presupuestos Generales del Estado y al parecer perjudicará a las políticas sociales de los ayuntamientos al recortarse las partidas en este aspecto. ¿Tiene conocimiento de ello?
—Sí. En un principio hablamos de unos presupuestos que siguen recortando en temas prioritarios como son los servicios sociales, porque como ya he mencionado, se están viendo desbordados por la situación actual. Sin embargo, desde el Gobierno Central lo que se hace es recortar, es más de lo mismo, lo que conlleva que miles de personas estén pasando calamidades. También se reducen inversiones en Fomento, en Educación, en Sanidad, es la pescadilla que se muerde la cola: si no se reactiva la economía, si cada día hay más gente en el paro, la situación no variará. No estamos de acuerdo con este tipo de políticas basadas en reducir el déficit para que los bancos alemanes y otras entidades financieras se salven.
—Acaba de comenzar el curso, ¿os han llegado quejas a causa de los recortes en este aspecto?
—Hemos mantenido reuniones con los distintos directores de los centros educativos de Conil y nos han comunicado que cuentan con menos recursos. Nos cuentan que se han incrementado las horas lectivas al tiempo que se reducen sus recursos. Claro que afectan estos recortes en Conil, de hecho contamos con una plataforma ciudadana por la educación pública. Por otro lado, desde el Ayuntamiento estamos viendo mermadas nuestras actuaciones por la situación económica que padecemos, notándose a la hora de realizar actuaciones en los colegios.
—¿Qué relación mantiene en Conil con los grupos que conforman la oposición?
—Tengo que decirlo claramente. La relación no está siendo todo lo buena que a mí me gustaría. Es muy fácil decir que va a haber colaboración, que habrá diálogo y negociación, pero sin embargo, ese diálogo y esa negociación, desde mi punto de vista, no está siendo el idóneo, no está siendo correcto.
—¿Por qué?
—Porque en temas importantes no estamos alcanzado acuerdos por la confrontación política, y creo que ahora es el momento de alcanzar acuerdos pero no vemos esa disposición por parte de la oposición, o por lo menos yo no la veo.
—Con Antonio Roldán (exalcalde) hubo muchos enfrentamientos con el PSOE… ¿ha mejorado esa situación desde que PSOE e IU gobiernan juntos en la Junta de Andalucía?
—A nivel local sigue exactamente igual, no ha cambiado. Nosotros hemos comentado en varias ocasiones que es necesario, no solamente porque en la Junta de Andalucía estemos gobernando juntos, sino porque en esta situación es necesario que todas las fuerzas políticas rememos en el mismo sentido. Luego los ciudadanos, dentro de tres años, decidirán en las urnas, pero ahora es importante que en proyecto que podamos llevar a cabo ir todos de la mano, dialogando, y en temas importantes si hay que dar el brazo a torcer, hay que darlo por el bien de todos los ciudadanos. Tengo claro que desde el Gobierno local no vamos a hacer todo bien, nos equivocaremos, para eso está la oposición, pero en aspectos importantes ellos tienen también que apoyar lo que le interesa al ciudadano y no lo que a ellos les interesa políticamente.
—¿Qué proyectos hay sobre la mesa para un futuro cercano en Conil?
—Proyectos importantes tenemos algunos en la localidad, algunos necesitan grandes inversiones y otros se pueden realizar sin tanto dinero. Uno de ellos es un proyecto que hemos vuelto a reactivar ahora como es el de la Chanca, activar un espacio público cuyas obras estaban paralizadas. Es un proyecto muy importante desde el punto de vista cultural ya que allí se ubicará un museo, la biblioteca, una ludoteca, y tenemos la esperanza de que para el próximo verano esté concluido. También tenemos unos terrenos para un nuevo polígono industrial cerca de la autovía. Este proyecto sí que necesita una gran inversión. Luego tenemos el proyecto del polígono de ocio, a base de inversión privada, pero también sabemos cómo está la economía. No son excusas pero sabemos lo complicado que es. También está el PGOU que nos ayudará a solucionar varios problemas y a legalizar las viviendas del campo. En este sentido, contamos con el compromiso de que antes de Navidad estará aprobado a manos de planeamiento urbanístico en Cádiz. Es un paso importante para el municipio. Ahora estamos trabajando en los presupuestos para 2013, y ese año pondremos en marcha lo que se denomina los presupuestos participativos, para que sean los ciudadanos los que elijan qué hacer con el dinero que tiene el Ayuntamiento.