Ahora que vuelve a estar sobre la mesa el debate sobre una fase previa fuera del Falla... Llegó una decimocuarta sesión de preliminares que vino a cargar de razones a los que apuestan por esta medida, pues la calidad sólo apareció a cuentagotas en una noche que tuvo a la comparsa de Manuel Cornejo, Los poderosos, como referente. Con una propuesta muy gaditana, la agrupación que toma el testigo de La alegría de Cádiz agradó gracias a la calidad de sus pasodobles y al buen hacer del grupo en una puesta de largo que no resultó redonda, pero sí bastante interesante.
Tampoco desentonó al inicio de la función el coro de San Fernando de los hermanos Betanzos, Victoriano Cano y Francis Sevilla Pecci, que dio un paso más en su evolución ofreciendo un buen pase con La suerte de Cádiz. También cumplió, en su caso con luces y sombras, la comparsa de Tarifa Tocando madera, un gran grupo de voces falto de conjunto. Las dos chirigotas de la jornada, por su parte, pincharon en hueso con propuestas bastante mediocres. Y caso aparte fue la joven comparsa Puente de plata, que firmó una de esas actuaciones que se recuerdan pasados los años (y no precisamente para bien). Es la magia de las preliminares, y que no nos falte.