El alcalde de Cádiz, José María González, ve paradójico que tenga que estar sentando en el banquillo de un juzgado por cancelar un ciclo de cine israelí patrocinado por la embajada de Israel "y no el Estado de Israel con la ocupación ilegal que viene perpetrando durante décadas y siendo condenado por cientos de organizaciones de defensa de los derechos humanos".
Cabe recordar que fue la organización Acción y Comunicación sobre Oriente Medio (ACOM) la que interpuso una denuncia contra el alcalde tras cancelar un ciclo de cine israelí septiembre de 2017, argumentando entonces el Ayuntamiento que el ciclo entraba en contradicción con el acuerdo de 2016 de adhesión a la campaña 'Espacio Libre de Apartheid Israelí'.
En declaraciones a los periodistas tras salir de declarar en los juzgados, González ha afirmado que ha acudido "en la disposición habitual del Ayuntamiento de Cádiz de esclarecer todas las oscuridades a contar por qué y sobre todo a reflexionar".
En este sentido, ha señalado que mientras declaraba se ha preguntado "por qué" estaba sentado en un banquillo "y no el Estado de Israel". "Con esta paradoja por delante, hemos explicado por qué el Ayuntamiento se adhiere a la campaña 'Espacio Libre de Apartheid Israelí' y por qué se entiende que el ciclo de cine se contradecía con la adhesión a ese movimiento, al estar precisamente organizado por el Gobierno israelí a través de la embajada", ha explicado.
El alcalde de Cádiz ha asegurado que no tienen nada "contra la cultura o el cine israelí", pero sí "contra la ocupación ilegal de Palestina". "Eso es lo que defendemos y seguiremos defendiendo porque no podemos hacerlo de otra manera, porque lo sentimos así y nuestro corazón y nuestra mente está con el pueblo palestino", ha añadido.
Finalmente, ha subrayado que tienen "claro" que van a "luchar contra el apartheid, el racismo y la ocupación ilegal de Palestina" y eso les "impide colaborar con el Gobierno de Israel mientras no cesa la ocupación". "Esa es nuestra única pega", ha concluido.
Por su parte, Diego Boza como representante de Apdha, ha incidido en “el uso torticero del sistema judicial español para tratar de acallar las voces de los defensores de los derechos humanos en Palestina”, añadiendo que “nosotros no nos oponemos a la libertad de expresión ni a que esas películas se emitan de Cádiz; se trataba de rechazar actos publicitarios como la que pretendía llevar a cabo la embajada israelí con ese ciclo para lavar su imagen”.
"Por encima de la ley"
Por su parte, Ángel Mas, presidente de ACOM, ha afirmado que "algunos se creen por encima de la ley". "Esos que son tan sensibles ante cualquier ofensa, real o supuesta, que puedan sentir múltiples colectivos son ahora los que reclaman impunidad para acosar, intimidar, excluir a una minoría como la judía en España, retrotayéndonos a lo que otros movimientos antisemitas, antidemocráticos y autoritarios perpetraron en Europa en el Siglo XX", ha añadido el presidente de la asociación.
En este sentido, Ángel Mas ha advertido de que "para prevenir situaciones como esa está el Código Penal y sólo los que temen al Estado de derecho tanto como a la democracia se manifestarían ante un juzgado para intentar coaccionar a un tribunal".
Finalmente, tras preguntar si están "boicoteando" también a Marruecos por su posición en el Sáhara o a Rusia "por ocupar ilegalmente Crimea", ha asegurado que "su problema es Israel, la mera existencia del estado judío. Odian a los judíos y usan las entidades que controlan para incitar y ejecutar ese odio".