Un grupo de vecinos que residen en los aledaños del Cortijo de las Albutreras han manifestado su desacuerdo con la nueva ubicación de la perrera, aprobada el pasado lunes en el pleno municipal por unanimidad. En representación de estos residentes, el vecino Alvaro Gutiérrez se puso ayer en contacto con VIVA CAMPO DE GIBRALTAR para manifestar que “hemos mandado varios correos al Ayuntamiento exponiendo el caso” y que “han hecho caso omiso a nuestras quejas”, por lo que anunció que van a presentar “en estos días” una instancia en el Ayuntamiento exponiendo nuevamente el caso “y esperamos que el ayuntamiento recapacite y no conceda las licencias”, agregó.
Afirmó, igualmente, que “también hemos tenido contacto con el defensor del pueblo, que nos ha dado algunas pautas”. Desde el punto de vista de este grup0 de vecinos, “no se ha contado en ningún momento con los vecinos que residimos justo en frente de la nueva ubicación”. Gutiérrez comentó que “nos van a encerrar en nuestras casas de por vida por el ruido, olores y hasta posibles plagas que va a generar tener 150 perros a escasos 400 metros de las viviendas”.
Este residente dijo entender que “quizás esto no sea interesante para nadie pero quizás a alguien le importe que al ayuntamiento de Los Barrios se decante por los intereses de una un particular, la persona que esta detrás de la asociación, frente a 40 familias de los barrios que pagan impuestos y a los que les van a joder -sic- la vida y su descanso para siempre”. Inundaciones Según el Ayuntamiento, la nueva ubicación se estaba dando para que se puedan evitar las inundaciones que sufren de manera recurrente las actuales instalaciones de la perrera, y que han obligado, a menudo, y no sin ciertas dificultades, a evacuar a los animales que en ellas se encontraban.
