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Campo de Gibraltar

El Consistorio revela a Fapacsa su estudio sobre los colectores

La prioridad será arreglar precisamente el colector de la zona de San Bernabé-Eroski-Parque Feria. La idea es desviar ese colector de Jacinto Benavente hasta el Arroyo de la Miel, en este caso por la avenida Ramón Puyol, con lo que se desahogaría el 50% del caudal que recibe el de la Cuesta del Rayo

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  • El alcalde, con Fapacsa. -

Representantes de la federación vecinal Fapacsa, encabezados por su presidente, Juan de Dios Regordán, conocieron ayer por boca del alcalde algecireño, José Ignacio Landaluce, junto a la consejera delegada de Emalgesa, Eva Pajares, y de la concejal responsable de Participación Ciudadana, María Victoria Zarzuela, el informe técnico elaborado para la mejora de la red de colectores de la ciudad.

Técnicos de Emalgesa y de la Mancomunidad de Municipios del Campo de Gibraltar han explicado que el objetivo fundamental que se persigue es evitar que se sigan produciendo inundaciones en la zona de la Cuesta del Rayo, para lo que se deben acometer varias intervenciones que desahogarían al colector de la calle Jacinto Benavente.

Primer proyecto
La idea básica, como ya ha quedado claro, es evitar que se vuelvan a repetir escenas como la del 6 de marzo de 2011, cuando se produjeron las terribles inundaciones en la Cuesta del Rayo y todo el agua y lodo procedente de San Bernabé que cayeron ladera abajo llenando de agua la Rotonda del Milenio, la Avenida Virgen del Carmen y las zonas adyacentes.

La prioridad será arreglar precisamente el colector de la zona de San Bernabé-Eroski-Parque Feria.
La idea es desviar ese colector de Jacinto Benavente hasta el Arroyo de la Miel, en este caso por la avenida Ramón Puyol, con lo que se desahogaría el 50% del caudal que recibe el de la Cuesta del Rayo.

Para ello, se necesita una inversión, estimada, de unos 2.478.596,39 euros (a los que habría que sumar el 13% de gastos de gestión, el 6% del beneficio de la empresa realizadora de la obra y el 21% de IVA) para llevar toda esa canalización hacia el otro lado, además de realizarse obras en la glorieta de la A-7 y unos refuerzos del terreno con captaciones agresivas, esto es, cambio de imbornales más grandes, casi del mismo ancho que las calles.

También se realizarían unos cambios en la calle Volantes, que recogen toda el agua de lluvia procedentes de la zona alta de la Plaza de Toros. En este caso no se podía hacer la operación de poner las grandes rejillas en el suelo por ser zona de feria y podría ser peligroso para las personas, especialmente para las mujeres que lleven tacones.

Segundo proyecto
La segunda de las acciones presentadas sería, nuevamente, desligar del colector de Jacinto Benavente el de la Avenida Virgen del Carmen, donde vana a parar los pluviales de Las Colinas, Doña Casilda, Carretera de La Granja y Reconquista.

En este caso, el estudio contempla una inversión de 1.516.969,32 euros (nuevamente sin contar impuestos y los gastos adicionales generados del mismo) para realizar un colector completamente nuevo desde la conocida Rotonda del Milenio y que, igual que el anterior, iría de desembocar al del Río de la Miel, lo que liberaría al de Jacinto Benavente de otro 25% de su caudal.

En este punto se le preguntó a los técnicos por el conocido Hoyo del Caballo, grupo de casas que están por debajo del nivel de la carretera frente a la Oficina de Hacienda. En este caso, “se entiende que lo que sucedió en marzo de 2011 fue consecuencia del mal funcionamiento de los colectores, especialmente del de San Bernabé, de ahí las inundaciones que hubo (el agua cubrió casi todas las viviendas). En este caso, si se llevan a cabos los arreglos mencionados, no volvería a ocurrir”, señaló Juan Manuel Ortiz.

Tercer proyecto 
El estudio contempla un tercer proyecto (todos dentro de uno general) que sería precisamente el de Jacinto Benavente.

Aquí, una vez liberado el 75% del caudal procedente de los otros dos colectores, el plan sería construir un vertedero transversal en la boca del colector de unos 30 centímetros de altura complementado por dos puertas estanco anti-marea que se abrirían sólo al paso del agua de esa lluvia.

Además, se instalarían unas turbinas (como las que existen en los túneles) para ir dando salida al aire acumulado que, en concentraciones altas y en caso de un escape, podrían llegar a ser mortales.

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