Agentes de la Policía Nacional han desarticulado una organización internacional dedicada al tráfico de hachís desde España hasta Trípoli (Libia) desde donde iba a ser distribuido por todo Oriente, según han informado hoy desde el Cuerpo de Seguridad en un comunicado de prensa.
La operación se ha saldado con seis detenidos -tres españoles, dos marroquíes y un inglés- por presuntos delitos de tráfico de drogas y pertenencia a un grupo criminal.
Entre los detenidos -cinco de ellos de entre 20 y 21 años- figura el cabecilla de la trama, de 61 años, y se han efectuado un total de cinco registros que ha permitido la incautación de 9.588 kilos de hachís.
La red investigada pretendía utilizar una empresa de exportaciones adquirida por el cabecilla para generar apariencia de legalidad y así tratar de desviar los controles policiales y aduaneros en los distintos envíos que realizara.
La investigación se inició tras recibir la comisaria de Fuengirola (Málaga) informaciones de la existencia de una red de narcotráfico que se dedicaba al envío de droga a Libia a través de una empresa de exportaciones.
Los agentes se percataron de que un británico que presentaba una relación con la red estaba buscando personas para poner al frente de una empresa de exportaciones.
Según las pesquisas, los profesionales averiguaron que había localizado a un individuo que se desplazó expresamente desde Inglaterra hasta la comunidad andaluza para realizar los trámites documentales que, finalmente, le permitieron hacerse con la empresa.
La empresa encargó una empaquetadora industrial que llegó al Puerto de Algeciras y fue trasladada a una nave que tenía alquilada en el Polígono Industrial de Palmones, en Los Barrios.
El principal investigado junto con otra persona se desplazó a Campillos (Málaga) donde adquirió 150 electrodomésticos que más tarde envió desde Algeciras a Trípoli en el interior de un contenedor, así la banda efectuó su primer envío con la finalidad de comprobar la seguridad de la ruta escogida.
Avanzadas las pesquisas, los agentes comprobaros que los individuos habían comprado otra tanda de electrodomésticos que se trasladaron de nuevo a la nave situada en el polígono gaditano.
Los agentes localizaron y detuvieron en el interior de la nave a dos individuos que introducían el estupefaciente en el interior de los electrodomésticos, fundamentalmente congeladores, que seguidamente envolvían dándoles apariencia de normalidad.
Una vez allí, se incautaron de 9.588 kilos de hachís y procedieron a realizar cinco registros, en los que detuvieron a otros cuatro integrantes de la organización, entre ellos el cabecilla.