Lo que tenía que haber sido el comienzo estelar de la nueva Liga Profesional de Fútbol Femenino (LPFF), denominada a partir de este curso Liga F, se ha convertido en una triste jornada en la que los partidos previstos para este sábado no pudieron disputarse a causa del parón convocado por las árbitras.
"Las árbitras y árbitras asistentes de Primera División Femenina deseamos comunicar nuestra decisión unánime de no dirigir ningún encuentro del Campeonato Nacional de la Primera División en las condiciones actuales de indefinición de nuestra situación laboral y económica", anunció el jueves el colectivo de colegiadas.
"En el contexto de una nueva competición profesional consideramos que el arbitraje femenino debe tener unas condiciones mínimas para el ejercicio de nuestra actividad dentro de la competición profesional. No es concebible que el estamento arbitral sea el único que quede al margen de un crecimiento que consideramos tan justo como necesario", añadió.
Pese a los intentos de todas las partes de acabar encontrando una solución, esta no llegó. El lunes, a las 12.30 horas, las colegiadas explicarán en conferencia de prensa los motivos del parón indefinido de su actividad.
La LPFF, que desveló que hace unos días trasladó una propuesta por la que el equipo arbitral pasaría a cuadruplicar sus emolumentos, anunció esta madrugada que todos los equipos iban a comparecer en los distintos partidos programados y que en el caso de que no compareciesen las árbitras y asistentes procederá a "presentar las correspondientes denuncias disciplinarias, solicitando se adopten las medidas sancionadoras correspondientes a tan grave incumplimiento, incluyendo su inhabilitación", y que reclamará "los daños y perjuicios que se generen".
Además aseguró la Liga que no iba a "aceptar chantaje alguno por parte de ningún colectivo o institución" y solicitó de nuevo "al CSD que utilice los recursos legales necesarios para garantizar el desarrollo de la competición profesional".
En este contexto de confrontación, las árbitras cumplieron con lo anunciado de no presentarse y los clubes también acudieron a los partidos, algunos como, por ejemplo, el Athletic, haciendo un largo viaje a Canarias para el encuentro contra el Granadilla Tenerife.
Los primeros partidos programados, Alhama-Madrid CFF y Atlético de Madrid-Real Sociedad, fueron los que vivieron la situación surrealista de los dos equipos sobre el césped calentando y formando sin poder disputar el partido por ausencia de arbitraje.
El debut en la máxima categoría del conjunto murciano, recién ascendido, quedó en nada. Ni la afición, que prácticamente llenó la grada del Guadalentín, ni las jugadoras pudieron celebrar su estreno en la elite.
María Pry, entrenadora del Madrid CFF y una de las de mayor experiencia en la máxima categoría del fútbol femenino español, reconoció que había "sentido mucho bochorno" por lo vivido. "No me esperaba una situación así. Entiendo que las árbitras están en su derecho de poder expresar lo que ellas sienten, esa libertad la tienen. Pero también es verdad que se podían haber hecho las cosas de otra forma, en otra medida", afirmó.
En el Centro Deportivo Wanda de Alcalá de Henares también hubo de aplazarse el duelo estelar de la primera jornada entre el Atlético de Madrid, aspirante de nuevo a alcanzar puestos europeos, y la Real Sociedad, segunda clasificada la pasada campaña tras el Barcelona.
Se vivió la misma situación de dos equipos preparándose y después formados en el centro del campo sin presencia arbitral, como ocurrió por la tarde en Villarreal para el partido ante el Real Madrid y en Tenerife para el choque en La Palmera contra el Athletic, que fue el equipo que tuvo que hacer el desplazamiento más largo y costoso.
El club canario había, "ante el aplazamiento de los partidos inaugurales de la Liga F por incomparecencia de las árbitras", recomendó a su afición "evitar desplazamientos que podrían resultar infructuosos ya que" no se puede "garantizar la disputa del encuentro".
Algunas jugadoras no dudaron en expresar su sentimiento. Por ejemplo, la internacional Aitana Bonmatí, centrocampista del Barcelona, manifestó en sus redes sociales: "Liga profesional, pero seguimos igual; mismos problemas y mismas perjudicadas, nosotras, las jugadoras. Queda MUCHO por hacer…".
Gemma Gili, de la Real Sociedad, también utilizó la misma vía para expresar que "tanto tiempo trabajando por una liga PROFESIONAL y parece que todo sigue igual… que pena que un día que debía ser feliz acabe siendo tan triste y con las mismas perjudicadas: nosotras!".
Este domingo volverá a ocurrir la misma situación en los partidos Levante-Alavés, Sporting Huelva-Sevilla, Valencia-Betis y Levante Las Planas-Barcelona.