Con el anuncio del fin del estado de alarma y el avance en el proceso de vacunación, el sector turístico se empieza a animar. En palabras de los responsables de este espacio hotelero “hemos cambiado nuestros hábitos de reserva, siendo menos previsores que antes de la pandemia y, sobre todo ahora, apreciamos mucho más el poder movernos sin límites. A pesar de nuestros cambios, las ganas de disfrutar y celebrar han ido en aumento durante este último año”.
Nos aseguran que la apertura del hotel “ha tenido muy buena aceptación y el hotel recobrará vida de nuevo este fin de semana, el primero tras el estado de alarma. Sin duda alguna, las ganas no han desaparecido y volver a ver el mar desde las terrazas privadas de las habitaciones o incluso gozar cada día de un amanecer inolvidable, es un plan irresistible”.
El hotel, cuenta con las instalaciones similares a las de un crucero con un toque vintage. La piscina, el solárium, los restaurantes y la terraza son una parte de la amplia oferta de servicios que tiene este hotel. El equipo humano del hotel, durante este medio año de cierre, ha continuado trabajando con el objetivo de “volver más fuertes, apostando por la mejora en la comodidad y el bienestar de sus huéspedes. Volvemos cargados de energía, con ilusión y esperanzados con esta nueva situación”, afirman.