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Viernes 22/11/2024
 

Galicia

'Bateeiros' rodean la Xunta contra las delimitaciones a la recogida de mejilla

Los manifestantes colapsan varias carreteras en Santiago y reclaman en San Caetano la dimisión de la conselleira do Mar

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Más de un centenar de 'bateeiros' han rodeado en la mañana de este jueves las oficinas de la Xunta en San Caetano, en Santiago, para protestar contra las delimitaciones de las zonas para recoger la mejilla impuestas por la Consellería do Mar.

Coches, furgonetas y hasta lanchas a bordo de un remolque han vuelto a colapsar sorpresivamente --como hace una semana-- carreteras de la capital gallega y patrullas de la Policía Local han tenido que salir a regular el tráfico en varias calles.

Frente al portal grande de San Caetano, los participantes en esta protesta han hecho sonar las bocinas y los megáfonos al tiempo que han pedido la dimisión de la conselleira do Mar, Rosa Quintana, a la que se han referido irónicamente como "percebeira".

El presidente de la Asociación de Mexilloeiros Illa de Arousa, José Manuel Oubiña, ha explicado que lo que quieren los 'bateeiros' es "que les dejen trabajar" la mejilla, que es la semilla del "futuro mejillón".

Ha acusado a la Consellería de restringir "muchas zonas" en las que llevaban "70 años recolectando mejillas y nunca hubo problemas" hasta que el año pasado se cerraron. Según cálculos de esta asociación, que engloba a propietarios de unas 2.000 bateas, "el 80 por ciento de la mejilla salía de esas zonas" ahora vetadas.

Para compensar esta medida, a comienzos de febrero la Xunta decidió abrir alrededor de 120 kilómetros de puerto para la recolección del producto, pero Oubiña ha insistido en que "no vale para las bateas". "Como si nos abren 300 kilómetros", ha agregado.

Ante este panorama, el presidente de la Asociación de Mexilloeiros Illa de Arousa ha advertido que está "muy en riesgo" la próxima campaña del mejillón "y los puestos de trabajo indirectos" que crea, con una bajada de la producción que ha estimado entre el 30 y el 40 por ciento.

"No nos negamos a que pasemos puntos de control, que nos miren... Lo único que pedimos es que nos dejen trabajar, no pedimos subvenciones ni nada", ha zanjado Oubiña.

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