El hospital Virgen de las Nieves de Granada se ha convertido en el centro a nivel mundial que más ha implantado un par de biomarcadores para detectar por sangre una lesión craneal leve, una técnica que minimiza un 33 % las radiaciones del paciente al evitar la repetición de TAC.
El servicio de Laboratorio del Virgen de las Nieves, en colaboración con los servicios de Radiodiagnóstico y Urgencias del Hospital de Neurotraumatología, implantó este procedimiento para detectar una patología causada, en la mayoría de los casos, por caídas, accidentes de tráfico y agresiones físicas.
Esa técnica le ha servido para ganar un reconocimiento internacional en los premios "Univants" a la excelencia en salud.
La novedad de la técnica consiste en el diseño y uso de dos biomarcadores que se miden en sangre para detectar lesiones cerebrales, después de un traumatismo craneoencefálico leve, conocidos como TBI, uno de ellos es la proteína ácida fibrilar glial (GFAP) y otro es la ubiquitina C-terminal Hidrolasa L1 (UCH-L1).
"Ambos son altamente específicos de lesión neuronal y axonal, y tienen cinéticas complementarias", ha explicado la especialista de Laboratorio y responsable de este proyecto, Gemma Álvarez.
Hasta la puesta en marcha de los dos biomarcadores, el médico de Urgencias sólo disponía de los datos recogidos en la historia clínica del paciente, la exploración física y la valoración en la escala de Glasgow, que permite medir, a nivel neurológico, el estado de conciencia de una persona.
El marcador se puso en marcha el 30 marzo del pasado año y, desde entonces, el equipo de especialistas de Laboratorio, junto con los de Urgencias del hospital de Neurotraumatología y Rehabilitación, han testado con este método 1.400 casos, lo que pone ese equipo de profesionales en cabeza en número de casos a nivel mundial.
El gran volumen de estudios y la eficacia de los resultados obtenidos han hecho que el hospital haya sido distinguido, recientemente, en el certamen "Univants of Healthcare Excellence" celebrado en Estados Unidos, además del segundo premio a la mejor comunicación oral en el XXIX congreso de la Sociedad Andaluza de Análisis Clínicos SANAC 2023.
Este sistema de diagnóstico se emplea en pacientes mayores de 18 años, con entre 13 y 15 puntos en la escala de Glasgow, siempre en las primeras 12 horas del traumatismo y sin pérdida de conciencia, o si la ha habido, inferior a 30 minutos.
Este método aporta como ventajas la agilidad en la clasificación de los pacientes, la mejora del protocolo interhospitalario y la disminución de los tiempos de espera del paciente en Urgencias, además de evitar traslados innecesarios.
Otro aspecto por destacar es la reducción de pruebas de tomografía axial computarizada (TACs), en torno al 33 %, lo que minimiza las radiaciones que recibe el paciente, con alto grado de eficiencia y seguridad.