Un grupo de 17 personas, extrabajadores de la mina de Riotinto, pensionados desde su cierre por problemas de salud, se han concentrado este lunes en la sede de UGT en la capital onubense con la intención de que el sindicato "dé la cara" tras no cobrar desde hace meses las ayudas sociolaborales, ayudas complementarias a su pensión que se firmaron en el convenio en 2005 y que suponen el 45 por ciento de sus ingresos. Algunos no cobran estas ayudas, que oscilan entre 300 y 600 euros, desde el pasado mes de noviembre y otros desde enero de 2012.
En declaraciones a los periodistas, uno de los afectados Rafael Perea se ha quejado del corte de estos ingresos, y ha asegurado que a cuatro de ellos, que llevan sin cobrar desde enero de 2012, la Junta de Andalucía "les pide entre 10 y 15 millones de pesetas por el cobro de estas ayudas, porque dicen que no es legal cobrar dos ayudas sociolaborales", no obstante Perea ha hecho hincapié en que "no cobran dos ayudas, sino la pensión y el complemento firmado, que ahora llaman ayuda sociolaboral", a través de la aseguradora Generali.
Otra afectada asegura que la Consejería explica que "verbalmente se han paralizado los embargos pero por escrito no tenemos nada", a lo que ha añadido que quieren que "se moje UGT, que es la responsable nuestra".
Por ello, Rafael Perea lamenta la respuesta de UGT que "no ha dado la cara" en todos estos meses, siento "todos afiliados desde el año 1980", por lo que espera una solución y ha añadido que "no se moverán" de la sede hasta obtenerla.
"Nos hacen una póliza con UGT como tomadora y nosotros como beneficiarios de esa póliza; nos cortan la póliza y nos la quieren innovar, entonces con la innovación viene entre comillas el engaño porque la Junta, a través de la Consejería de Empleo, nos dice que dos ayudas no podemos cobrar", ha enfatizado Perea.
A su vez, ha criticado que el secretario general de Fitag-UGT Huelva, Luciano Gómez, que "estuvo presente en la firma de la póliza, diga ahora que no nos conoce. Esto se recogió en el convenio de 1995 que también lo tienen ellos y ahora nos quiere dejar tirados en la cuneta".
"Mi póliza es tan legal como cualquiera que han hecho porque me la firma UGT y la Junta y la acoge Generali. Y ahora por el capricho del cambio de nombre de estas ayudas, que nos pertenecen por ley, nos lo han cortado", ha matizado Rafael Perea, a lo que añade que "no son prejubilados o jubilados, sino pensionistas por desgracia".
Por ello, ha hecho hincapié en que "más que engañado", se siente "impotente porque UGT no da la cara, la oficina de la franja pirítica, donde se firmaron las pólizas, se ha cerrado y ahora Luciano dice que no nos conoce".