Es evidente la carencia de gol del Decano en el último y más crucial momento de la temporada. Sólo han marcado once tantos en 16 encuentros, han marcado un gol y de penalti en más de un mes y llevan cuatro partidos sin ver puerta. Además, han ganado uno de los últimos nueve encuentros. De esta forma, es difícil pensar que el Recre tenga posibilidades para ascender a la élite española y fácil que el seguidor recreativista posea un estado anímico de tristeza tras llevar ocho meses de campeonato entre los primeros clasificados.
   Uno de los jugadores clave del equipo onubense en ataque es Miguel Linares. El ariete maño es el ‘pichichi’ con 10 dianas, tres de ellos con el pie derecho, cinco con el izquierdo y dos de cabeza. Es un hombre ‘titularísimo’ para su entrenador, Sergi Barjuan, al salir de inicio en 30 de los 35 encuentros disputados. Acumula 2.555 minutos en total pero solo ha conseguido mojar una vez en toda la segunda vuelta de campeonato. Estadísticas muy pobres para un futbolista llamado a ser el ‘hombre gol’ de Recreativo en esta temporada.
   El año para Linares ha sido de más a menos y apenas intenta salir de este bache por el estado físico y mental que atraviesa tanto él como el resto del grupo. Hizo ocho goles en las 18 primeras jornadas, además de otros dos tantos en Copa del Rey, y a partir de ahí se fue diluyendo el ‘efecto Linares’ en el equipo. Posteriormente, consiguió un bello tanto de tacón ante el Real Jaén y otro contra el Zaragoza en casa.
   La falta de confianza en sí mismo que tiene Linares se puede comprobar en varias acciones en el choque ante el Mallorca en su estadio, ante el Éibar que lanzó en alguna ocasión a más de 30 metros del área o contra el Numancia que disparó intermitentemente sin crear el más mínimo peligro. Su futuro está en el aire y es una incógnita. El delantero aragonés firmó por una temporada, ya que llegaba a Huelva tras varios años sufriendo lesiones de gravedad. Eso sí, Linares está cerca de superar su record goleador en Segunda división, al hacer también diez goles con el Salamanca en la temporada 2009/10.
   Pero no sólo es Linares el foco de las críticas por la falta de acierto en el Decano. Otros jugadores de ataque como Joselu o, el incorporado en el mercado de invierno, Aloys Nong tampoco dan la cara.
    El puntero onubense desperdició las escasas opciones de gol claras del Decano ante los sorianos el pasado fin de semana y el camerunés después de una larga trayectoria en Bélgica ha aportado muy poco al conjunto albiazul. De hecho,  no se ha estrenado en los siete partidos partidos que ha jugado siendo en dos de ellos titular ante Real Madrid Castilla y Lugo.
     El gol se paga y el Decano tuvo la oportunidad de conseguirlo en el mercado invernal, como hizo el Deportivo de la Coruña, que atravesando por circunstancias similares a la de los onubenses se hizo con las llegadas de Toché y de Ifrán, que han dado un plus de calidad a la plantilla.
      El equipo de Sergi, que dependía de la efectividad de los puntas y de la llegada en segunda línea, atraviesa uno de los peores momentos goleadores de los últimos años.
    En jugadores como Montoro, Arana, Ezequiel o, incluso, Gallegos se tenían depositadas esperanzas que no han terminado de colmar.
   Por esta circunstancia de fútbol, de goles y de bajón físico, no queda otra que subir a jóvenes de la casa. José Naranjo suma casi una veintena de tantos en la tercera división del fútbol español y Dani Molina o Antonio Domínguez han hecho méritos suficientes para tener una oportunidad con el primer equipo, más si cabe teniendo en cuenta el rendimiento que están ofreciendo los ‘hombres gol’ del Decano.