La vicesecretaria general del PSOE de Huelva, María Márquez, ha mantenido este jueves una reunión con representantes de estudiantes de la Universidad de Huelva para analizar el modelo de grados, conocido como 3+2, que "pretende imponer el PP", y ha anunciado una serie de iniciativas para exigir su retirada, entre ellas una moción en todos los ayuntamientos de la provincia que pide que se garantice la igualdad de oportunidades.
En el encuentro, en el que también ha estado presente el secretario general de Juventudes Socialistas de Huelva, Sebastián Pérez Coronel, se ha remarcado el apoyo de esta formación a la huelga de estudiantes convocada contra esta reforma universitaria, que "supone un auténtico retroceso en materia de igualdad para la Universidad". La organización juvenil ha reclamado, igualmente, diálogo al ministro de Educación, José Ignacio Wert, ya que "es intolerable que el Gobierno del PP se niegue a escuchar a estudiantes y representantes de la comunidad universitaria".
María Márquez, que forma parte como número dos de la candidatura del PSOE al Parlamento andaluz en las elecciones del 22 de marzo, ha remarcado que este partido "no va a tolerar que se construya un nuevo sistema universitario excluyente". En este sentido, ha subrayado que "el Partido Popular está pretendiendo poner en marcha un nuevo modelo en el que no tengan cabida los hijos de los trabajadores y trabajadoras y eso no lo vamos a permitir".
La también vicesecretaria general de Juventudes Socialistas de España ha explicado que en la reunión de trabajo celebrada con representantes estudiantiles se ha acordado llevar a cabo cuantas iniciativas sea posible para "frenar este ataque de la derecha contra la Universidad". Así, ha precisado que se va a presentar una moción en todos los ayuntamientos de la provincia de Huelva.
Márquez ha señalado que aún tenemos reciente "la polémica por la reforma de tasas y becas propiciada por este Gobierno del PP, que parece obsesionado en legislar contra una mayoría de ciudadanos y ciudadanas que no tienen los mismos recursos que esa minoría a la que parece mirar siempre la derecha".
A su juicio, la medida que se está planteando ahora "supone dar libertad a las universidades para que reduzcan en un año la duración de los grados y que implanten másteres de dos, de manera que se castiga más a la universidad pública y se complicará aún más el acceso de quienes no puedan pagarlo".