Es el mayor productor de cobre de España, la tercera mayor fundición y refinería de Europea y la primera empresa por facturación y exportación de Andalucía, además de ocupar el puesto 77 en el ranking de empresas españolas por facturación. Con esta carta de presentación, Atlantic Copper, empresa onubense propiedad del grupo Freeport-McMoran, hacía este miércoles balance de 2017, un año marcado por la parada técnica realizada en mayo, que no ha hecho demasiado mella en los resultados finales, pues han conseguido mantener niveles de producción similares a años anteriores.
Así, en 2017 la empresa facturó un total de 1.789 millones de euros, lo que supone un 10% más respecto al año anterior como consecuencia fundamentalmente del mayor precio del cobre en el mercado internacional. Esta cifra le ha permitido obtener un margen operativo de 43 millones de euros, y un resultado neto de 24 millones. Este año, el resultado neto se ha visto afectado por la parada de mantenimiento realizada que tuvo lugar en el mes de mayo y por unos menores márgenes de refino. “Aun así, estos efectos han sido parcialmente compensados por el efecto positivo del tipo de cambio y el mejor margen del ácido sulfúrico”, ha explicado la directora general económico-financiera de la compañía, Macarena Gutiérrez.
El 54% de la facturación procedió de las ventas en el mercado nacional, mientras que el 46% se destinó a la exportación, siendo Asia, con el 19%, y los países mediterráneos, con el 15%, los principales destinos de sus ventas en el extranjero.
Durante el pasado ejercicio, en el Complejo Metalúrgico de Huelva se fundieron 1.025.000 toneladas de mineral de cobre y se alcanzaron 271.000 toneladas de cátodos de cobre de alta calidad (99,99%) producidos, ha apuntado el director general de Metalurgia, Miguel Palacios.
Para ello, la compañía hizo frente a unos costes operativos por valor de 128 millones de euros, de los cuales un 28% corresponde a la factura energética y un 27% a gastos de personal.
La inversión realizada por la compañía en 2017 ascendió a 35 millones de euros, en cuya cifra tienen una importante repercusión las actuaciones acometidas durante la parada técnica de mantenimiento del mes de mayo. Con estos datos, Atlantic Copper ha invertido un total de 152 millones de euros en los últimos cinco años, con una previsión cercana a otros 78 millones de euros hasta 2020.
En relación con el apartado energético, Palacios ha subrayado que el complejo de Atlantic Copper en Huelva está a la cabeza de las principales fundiciones y refinerías de cobre del mundo en eficiencia energética al registrar el menor consumo unitario. Otro dato destacable en 2017 en cuanto a la optimización de los recursos naturales es la reducción de un 11% del consumo de agua.
Además, la fundición ha logrado que el 25% de la energía que necesita provenga de la autoproducción, es decir, de la reutilización de recursos como el agua o el vapor. Ahora el reto es lograr que otro 25% lo obtengan a partir de energía renovable.
De hecho, según ha explicado la directora general económico-financiera de la compañía, ella misma dirige un proyecto para lograr ese 25% de energía a través de una planta fotovoltaica, a través de acuerdos de compra de energía renovable (PPA). Ahora están inmersos en el análisis de varias propuestas y la idea es cerrar los trámites en 2018, con la intención de poder consumir esa energía en el año 2020.
De este modo, sólo el 50% de la energía que requieren provendría del suministro energético ordinario.
Medio ambiente
De otro lado, tras remarcar “los esfuerzos que realiza la compañía por adaptarse y cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible en materia de medio ambiente”, han apuntado que Atlantic Copper realizó en 2017 una inversión de 4,5 millones de euros en acciones relacionadas exclusivamente con la mejora medioambiental. La inversión en este concepto asciende a 90 millones en los últimos diez años.
“La innovación, siempre presente en los procesos de Atlantic Copper, ha permitido reducir en un 77% la emisión de partículas y en un 26% las de dióxido de azufre (SO2) en la última década, situándose un 91% y un 62%, respectivamente, por debajo del límite establecido legalmente”.
Concesión del Puerto
Por último, cuestionados por la concesión de una parcela para el almacenaje del silicato de hierro tras las críticas de algunas voces de la capital que aseguran que se trata de un “vertedero”, Palacios ha lamentado estas afirmaciones cuando se trata de una permuta de parcela con el Puerto, a instancias de la propia Autoridad Portuaria, puesto que la actual de la empresa le viene mejor al Puerto por su ubicación de cara a la futura Zona de Actividades Logísticas (ZAL).
Así, ha explicado que se trata solo de una permuta y de un cambio de ubicación, incidiendo en que de dicho material “se vende todo” lo que se produce por sus múltiples usos, alcanzando el pasado año más de 600.000 toneladas.
