Para que la novena Fiesta del Primer Aceite brillase como nunca lo había hecho solo hacía falta que la meteorología acompañase y esta lo hizo. Éxito rotundo el que ha cosechado esta feria que durante todo el fin de semana ha exhibido en el casco histórico de la capital algunos de los mejores aceite del mundo. En concreto fueron 87 las almazaras que mostraron sus AOVEs de cosecha temprana a los miles de visitantes que pasearon por los stands distribuidos entre las calles Roldán y Marín y Bernabé Soriano, pasando por la Plaza de la Constitución. Ya desde que el sábado, cuando se sirvieron las primeras tostadas con pan y aceite de Jaén, se supo que iba a ser una edición de asistencia multitudinaria.
No cupo un alfiler en las mesas instaladas en La Carrera y desde bien temprano comenzó la venta en los expositores. Las actividades, como las catas de aceite o las visitas turísticas, también se llenaron hasta la bandera y es que el objetivo de esta edición era llevar la Fiesta del Primer Aceite un paso más allá de lo culinario, que lo hubo también y muy bueno. Se diseñó el programa para mostrar lo mucho que tiene que ofrecer Jaén turísticamente y fueron muchísimas personas las que aprovecharon esta oportunidad. Porque la cultura que hay entorno al aceite de oliva significa mucho más, como destacó la periodista Angels Barceló en su pregón.
En él aseguró que el primer árbol que plantó en el jardín de su casa fue un olivo y que le traen no pocos recuerdos esas aceitunas que su padre aliñaba con cariño para servirlas después en la mesa. Afirmó la periodista catalana que, tras haberse preguntado a si misma cómo de importante había sido el aceite de oliva en su vida llegó a la conclusión de que “no entiendo mi vida sin su presencia, en la mesa de la cocina de mi madre, de mi abuela y en la mía”. No es la única que no puede entender la cocina sin aceite de oliva virgen extra. Fueron centenares los que aprovecharon el fin de semana para llevarse a casa algunos de los ‘oros líquidos’ de más calidad que hay en el mercado y, para aquellos que aún tienen dudas sobre cómo emplearlos, el chef Javier Jurado hizo una demostración en directo de cómo elaborar el ‘Ajoatao’ así como los 30 chefs jienenses reconocidos por Diputación crearon ante el público una pipirrana que se pudo degustar en la Plaza de la Constitución.
Allí se ubicaran algunos de los stands con productos de artesanía muy variados pero que tienen en común entre ellos que de una forma u otra está derivados del olivar. Encontraron lo que buscaron aquellos que acudieron a la Fiesta del Primer Aceita con la esperanza dar dar con su tocado ideal para una celebración o los que andaban faltos de un buen mantón personalizado y decorado a mano. No faltaron los productos de cosmética ni la cerámica de la tierra, todo con una relación estrecha con el mar de olivos de la provincia. También se puede encontrar muy buen pan en la provincia de Jaén y no fueron pocos los expositores (que este año han tenido el doble de espacio que en ediciones anteriores) en los que ha habido pan artesanal de varios municipios jienenses.
Se gastaron decenas de barras entre ‘mojeteo y mojeteo’ aunque algunas de las botellas, cuando se abrían para rellenar los platos de prueba, daba hasta pena volcarlas de lo espectaculares que lucía. La apuesta por la calidad a la que tanta referencias se hizo en esta Fiesta del Primer Aceite va más allá de unos parámetros en el producto. Un embotellado cuidado hace que el valor del contenido crezca considerablemente y las almazaras son cada vez más conscientes de ello. Así, se pudieron ver algunos dentro de frascos confeccionados por diseñadores de la tierra y otros con ilustraciones que bien podrían haber estado en un museo.
Entre los encargados de los stands una sensación que resumió muy bien Raúl, uno de ellos: “Esta es una oportunidad prácticamente única no ya solo de mostrar los avances que estamos haciendo a la hora de comercializar nuestro aceite sino que muchos de nosotros venimos también a aprender de lo que se está haciendo en otras almazaras de la provincia. Creo que nos va a venir muy bien a todos para seguir mejorando”. Deben seguir haciéndolo porque en un año Diputación Provincial volverá a ofrecerles la oportunidad de brillar en la décima edición de una Fiesta del Primer Acete que en unos días hará las maletas y pondrá rumbo hacia Alcala de Henares, donde podrán disfrutarse nuevamente de las catas, botellas que son más propias de perfumes y, en definitiva, un producto de una calidad cada vez mayor.
