El aeropuerto de Jerez ha contabilizado 862.330 pasajeros entre los meses de enero y noviembre, 216.017 menos que en el mismo periodo del ejercicio 2019, lo que supone un retroceso del 20 por ciento.
Lejos de que se esté produciendo una recuperación tras el periodo de pandemia, lo cierto es que el aeródromo jerezano ni siquiera es capaz de igualar las cifras del año pasado, cuando a estas alturas del ejercicio había sido utilizado por 870.731 pasajeros, 8.401 menos que en esta ocasión.
A pesar de eso, desde Aena se sigue valorando el hecho de que el tráfico doméstico se muestre “especialmente dinámico”, con un repunte del 9,9 por ciento en la cifra de viajeros respecto al mismo periodo de 2022
El grueso de los pasajeros contabilizados viajó en conexiones comerciales (excluye aviación general y ejecutiva), al sumar 855.049. De ellos, 530.780 lo hicieron con destino u origen en alguna ciudad española, mientras que 324.269 optaron por vuelos con el extranjero.
En cuanto a las operaciones, el aeropuerto de Jerez atendió en el periodo tomado como referencia 46.099 movimientos (7.442 de ellos, comerciales), un 14,8 por ciento por encima de los registros de 2022.
La aportación del mes de noviembre al balance de tráfico acumulado en estos once meses fue de 44.814 pasajeros y 4.191 vuelos (494, comerciales). En este caso, la pérdida interanual de usuarios fue del 12,6 por ciento, ya que en el mismo periodo del pasado ejercicio se alcanzó la cifra de 51.298 pasajeros.
De los 44.233 usuarios que viajaron en operaciones comerciales, 34.979 tenían origen o destino en territorio nacional y 9.254, en el extranjero.
En cuanto al tráfico internacional, Alemania concentró el grueso de la demanda, con 8.334 pasajeros en vuelos con destinos de ese país, seguido, a bastante distancia, de Bélgica (384) y Bulgaria (337).
