La crisis económica y financiera acabó, en los cuatro primeros años de la crisis, con al menos el 12% de las empresas existentes en Algeciras y con el 9,69% de las compañías existentes en el Campo de Gibraltar.

Así lo reflejan los últimos datos disponibles del Instituto de Estadística de Andalucía, dependiente de la Consejería de Economía y Hacienda, respecto a la evolución entre 2007 y 2010, a lo que se une la estimación del presidente de la Cámara de Comercio, Carlos Fenoy, con respecto al año recién finalizado, a la espera de que a mitad de año se publiquen las cifras de 2011.

Según esta estadística acumulada, en esos cuatro años la comarca pasó de tener 14.188 empresas a 12.813, un 9,69% menos, lo que vino acompañado de una pérdida del 24,84% de los empleos relacionados con la actividad empresarial. Así, de los 52.513 empleados que trabajaban para estas empresas hace cinco años, sólo quedaban 39.468 a principios del pasado año.

Constante
La tendencia se ha mantenido, también, durante 2011, según aseveraba el presidente de la Cámara de Comercio del Campo de Gibraltar, Carlos Fenoy.

El máximo representante de la entidad cameral resaltó que, “si bien no tenemos aún los datos numéricos, que llegarán a lo largo de este año”, existen estimaciones que parten de consultas “relacionadas con nuestro índice de confianza empresarial trimestral”. Ello refleja que “2011 fue al menos igual de malo que 2010” y que, de momento, “no hay perspectivas de que 2012 vaya a ser un mejor año”.

Según Fenoy, “el 2012 va a ser igual de malo porque, aunque se adopten medidas por parte del Gobierno, la debilidad es tan grande que no hay modo que la actividad levante”. Sin embargo, comentó que si las medidas tomadas por el Gobierno “son adecuadas, con tiempo puede producirse un repunte de la actividad, pero no de forma inmediata”.

Evolución
En esta estadística hay, al menos, dos datos que separadamente merecen consideración. Por un lado, está el número de empresas existente cada año, y, por otra parte, la cantidad de empleos generada por su actividad. La evolución de un aspecto no siempre ha coincidido con la del otro. De hecho, entre 2007 y 2008 creció el número de empresas en Algeciras (de 6.626 se pasó a 6.803), y, sin embargo, se perdieron 397 empleos en el camino. Fenoy explica este fenómeno:

“En 2007, que fue ya un año de crisis, se produjo una reducción en el tamaño de las empresas respecto a su número de empleados, pero huno repunte en creación de nuevas empresas ‘porque había muchos desempleados a los que se les terminaban las prestaciones y, al no querer trabajar por cuenta ajena, iniciaron una actividad empresarial.

Agudización
Sin embargo, la agudización de esa crisis ha igualado los términos, y ahora descienden ambos datos. De hecho, entre 2008 y 2009, cayeron en la comarca 1.366 empresas, con una pérdida de casi 7.000 puestos de trabajo.

Jimena es el municipio donde han caído, proporcionalmente, más empresas (un 12,85% menos hasta 2010), seguida de Algeciras (un 12,68%). En cuanto a la caída del empleo en la comarca, también Jimena ha sido la más afectada, con un 31,48%.

El presidente de la Cámara de Comercio, Carlos Fenoy, resaltó que “habría que aplicar medidas tendentes a la flexibilización de la contratación” para fomentar la actividad empresarial, que sigue en declive desde el inicio de la crisis en 2007.

Ya entonces, “desde consejo superior de cámara, antes de las pasadas elecciones”, publicaron un documento “que hacía hincapié” en el aspecto de la pérdida del tamaño de las empresas, para lo que había que aplicar medidas flexibilizadoras”.

Para Fenoy, “no puede ser que paguemos 40% cotizaciones frente a otros países europeos”, que pagan, evidentemente, mucho menos.

Posteriormente, habló de los trámites administrativos, cuya reducción permitiría una mayor agilidad en la creación de empresas. Todo esto y otros incentivos para crear compañías pueden reactivar el mercado.

Lentitud
En cualquier caso, Fenoy se reiteró en que “la debilidad” actual de la economía es tal que las medidas que pueda tomar el Gobierno, caso de ser positivas, no provocarán “un repunte de la actividad inmediato”.

De este modo, “habrá que seguir hablando con administración e intentándolo”, empezando por “la eliminación de taras burocráticas que son un freno a creación de empresas.

Asimismo, cuestiones pendientes como el posible incremento del IVA o un aumento de otras tasas impositivas pueden influir en el desarrollo de la actividad empresarial.

Fenoy recordó que 2012 se presenta como “otro año malo”, como ya lo fuera 2011, cuando la destrucción de empresas continuó.