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Jueves 05/12/2024
 

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Despedida emotiva en el funeral civil de Castilla del Pino

La comunidad universitaria, académica y política rindieron un emotivo homenaje

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  • Entrada del féretro con los restos de Carlos Castilla del Pino, en el rectorado de la Universidad de Córdoba -
El prestigioso psiquiatra Carlos Castilla del Pino, hijo predilecto de Andalucía en 1985, natural de San Roque, que residía en Córdoba, fue incinerado ayer al mediodía en el tanatorio de Las Quemadas de la capital cordobesa, en el marco de una ceremonia civil, por decisión expresa de su familia para respetar así sus deseos, tras su fallecimiento la madrugada del pasado viernes, víctima de un cáncer, cuando contaba 86 años de edad.

La comunidad universitaria, académica y política rindieron homenaje al fallecido, al que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, calificó en un telegrama enviado a la familia como un hombre “patrimonio de España que liberó y sanó la conciencia humana”. Durante el funeral civil celebrado en el rectorado de la Universidad de Córdoba, se leyó dicho telegrama en el que destacó el ejemplo de “compromiso y justicia que representó el psiquiatra”, y subrayó que Castilla del Pino “no renunció jamás a la paz durante la Transición”.

Por su parte, el presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, que participó en el acto que congregó en Córdoba a más de 400 personas, manifestó que Castilla del Pino era “más que un hijo predilecto de Andalucía, ya que ha sido una referencia que ha marcado tantas cosas en tiempos tan difíciles”, y consideró que “va a sobrevivir a su propia muerte” y que fue un hombre “para todas las situaciones y todas las épocas que le tocó vivir en tiempos muy difíciles que no debemos olvidar y que no significa abrir nuevas heridas”.

El alcalde de Córdoba, Andrés Ocaña, mostró el “profundo pesar de la ciudad por la muerte de un gran amigo, de un intelectual, ejemplo de compromiso y referente para la cultura y la psiquiatría en España”. Por otro lado, el presidente de la Real Academia de la Lengua (RAE), Víctor García de la Concha, recordó que cuando Castilla del Pino ingresó en la institución hace más de cinco años demostró que era “tan sabio en humanidades como experto en humanidad”, y resaltó que el psiquiatra “no tenía otro propósito que convertir la vida en biografía edificada por la palabra precisa que hacía próxima y que convertía en mariposas gracias a su toque”.

Otra de las personas que intervinieron en el acto de despedida de Castilla del Pino fue el rector de la Universidad de Córdoba, José Manuel Roldán, quien destacó su “carácter” como docente e investigador, sobre todo, y como investigador, “su espíritu crítico”, así como lo puso modelo para las generaciones siguientes. En esta línea, Roldán incidió en el orgullo que supone para la Universidad de Córdoba “haber contado contar con él como catedrático hasta su jubilación”.

La secretaria de Estado, Amparo Rubiales, se refirió a él remarcando que “fue un avanzado en las ideas de la igualdad entre hombres y mujeres en su tiempo, lo que se reflejaba en alguno de sus ensayos”.

Asimismo, también intervino el secretario de la Fundación Castilla del Pino, así como una profesora de literatura de Barcelona, Ana Caballé, quien publicó en un libro sus conversaciones con el psiquiatra, y comparó al fallecido con un “río firme como el Guadalquivir cuya vida sólida en sus compromisos y pensamientos ha sido tan fértil que ha regado muchas y lejanas tierras”.

Para Caballé, el cauce de la vida del profesor Castilla del Pino “no estuvo exento de enormes dificultades”, si bien “siguió adelante y ya llegó al ancho y abierto mar de la memoria en el que permanecerá”.

Por su parte, la presidenta de la Comisión de Igualdad del Congreso, Carmen Calvo, manifestó que España debe estar “agradecida” por la “decencia de la vida de Castilla del Pino que se dedicó desde sus ideas y su obra a la decencia de este país en tiempos muy complicados”.

Por último, y entre las intervenciones, se interpretaron piezas de música clásica como Viaje de invierno, de Schuber, así como otras de las obras favoritas del fallecido.

Biografía
El psiquiatra, también neurólogo y ensayista, Castilla del Pino, fue autor diez ensayos e investigaciones relacionados con la neuropsiquiatría, con uno de ellos, El delirio, un error necesario, consiguió el Premio Internacional de Ensayo Jovellanos en 1997.

También escribió dos novelas, Una alacena tapiada en 1991, y Discurso de Onofre en 1999, así como dos libros de memorias, en los que recogió su experiencia personal y de la España en que le tocó vivir, Pretérito imperfecto. Autobiografía (1922-1949) en 1997 y Casa del olivo. Autobiografía (1949-2003) en 2004.

La presencia del profesor Castilla del Pino en San Roque fue continua desde el primer Curso de Verano, en 1980. El seminario que dirigió durante muchos años en  dicho programa académico sobre antropología  de la conducta, le hacía volver cada verano a su ciudad, aprovechando para encontrarse con sus amigos y pasar una temporada disfrutando de la que siempre consideró su referente sentimental.

Entre las obras que están pendientes de una próxima edición figuran sus intervenciones en las distintas ediciones del Curso. Temas como El discurso de la mentira, La teoría del personaje, El silencio, La obscenidad o La envidia formaron parte de dicho seminario sanroqueño.

Su última contribución relacionada con su pueblo fue el prólogo de un libro del artista y amigo personal del académico, Juan Gómez Macías.

San Roque reconoció en todo momento la aportación intelectual de este gran trabajador de la cultura y de la ciencia. En 1985 le  concedió el título de Hijo Predilecto y dio el nombre a uno de los  institutos de secundaria de la ciudad.

Asimismo en el año 1998 le otorgó el reconocimiento de Sanroqueño del Año y en 2004 fue nombrado doctor Honoris Causa por la Universidad de Cádiz, celebrándose el acto académico en el Teatro Juan Luís Galiardo de San Roque.
En ese mismo año, al celebrarse el XXV aniversario del Curso de Verano ofreció la conferencia inaugural, que versó sobre La idea de la locura en Cervantes. Dos años más tarde, en 2006, coincidiendo con el Tercer Centenario de la fundación de San Roque, fue descubierta una placa en la fachada de la casa donde nació el académico.

También intervino en el Aula de Literatura José Cadalso, que con tal motivo publicó un fragmento de una novela corta inédita J y K, demostrando la maestría de un gran narrador. Y fue elegido miembro de la Real Academia de la Lengua.

Por otro lado, en el año 2002 obtuvo la Medalla del Círculo de Bellas Artes de Madrid y en el 2003 sustituyó al Nobel Camilo José Cela en el sillón Q. Además, el prestigioso psiquiatra fue cuatro veces candidato al Premio Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales.

Ayuntamiento
El municipio de San Roque estuvo ayer presente en la ceremonia de despedida al eminente humanista sanroqueño Carlos Castilla del Pino. Así, junto al alcalde, Fernando Palma, estuvieron los ediles José Antonio Ledesma, Juan Carlos Galindo, José Antonio Cabrera, Manuel Melero, y María Jesús García Illescas, además del gerente de la Fundación Municipal de Cultura Luis Ortega Brú, Juan Gómez Macías.

El Ayuntamiento declaró el pasado viernes tres días de luto, durante los que las banderas de los centros oficiales ondean a media asta y colocó un crespón negro en la placa en su honor en la casa en la que nació, en la calle Colón.

Además, en el Pleno Institucional que se celebrará el día 21 de mayo, con motivo del 303 aniversario de la ciudad, el gerente de la Fundación de Cultura, Juan Gómez Macías, leerá un manifiesto en su recuerdo. Por su parte, el concejal de Educación, Ramón Ramírez, representó al Consistorio en un acto que tuvo lugar en el Instituto de Educación Secundaria Carlos Castilla del Pino. Por otro lado, la televisión municipal, Canal San Roque, ha colocado un lazo negro y realiza una programación especial, recordando imágenes de Carlos Castilla del Pino y su vinculación con el municipio.

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