No se frotan las manos como antes de la crisis, ni hay las colas de antaño antes de que las tiendas abran sus puertas, pero los comerciantes del centro creen que el repunte que se ha instalado en las ventas de entre un cinco y un diez por ciento en la pasada campaña navideña también contagiará a las rebajas de invierno. Aunque buena parte de los negocios tradicionales, además de las franquicias, han optado un año más por adelantar la temporada oficial de descuentos varias semanas antes por el filón de los regalos de Papá Noel y los Reyes Magos, los más fieles a la tradición siguen apostando por el día siguiente de Reyes para colocar el cartel de ofertas en sus escaparates, como es el caso de las tiendas de Inditex (Zara, Oysho, Pull&Bear..,), El Corte Inglés y otras firmas conocidas. Algunas empiezan fuerte, con promociones desde el 50% incluso.
En plena resaca navideña, gran parte de las colas responde a varios tipos de clientes: los que acuden a la caza y captura de la ganga perfecta, los que lo hacen para adquirir el artículo que Melchor, Gaspar y Baltasar no les han podido conseguir porque se les iba de presupuesto, los que quieren devolver algún regalo para aprovechar los descuentos o coger el importe o quienes desean invertir el dinero o las tarjetas regalo que les han caído. Estos días se ve de todo y, ayer de nuevo las aglomeraciones no fueron tanto de público como de coches en los accesos a los centros comerciales y a los grandes almacenes, sobre todo por la tarde. Cada uno barre para su terreno, y el pequeño y mediano comercio augura unas rebajas “fabulosas” en lo que a chollos se refiere en parte debido a las atípicas temperaturas que tantas alegrías ha dado al sector de la hostelería. Y es que los que este año se han comprado un abrigo nuevo, salvando jornadas puntuales como la de la Cabalgata de Reyes, han tenido poca oportunidades para lucirlo.
Ahora, por tanto, llega el momento de deshacerse de esta mercancía para adquirir la nueva para la temporada que viene. “Nosotros no tenemos la capacidad de las grandes cadenas, y tenemos que echarlo todo fuera. El frío no ha llegado y los clientes van a poder encontrar abrigos tirados de precio, y lo mismo con los zapatos”, señala el presidente de Asunico, Manuel García, que asegura que en los últimos años la adversa situación económica también ha acabado con las compras compulsivas. Esto, sumado a que cada vez más por la ley de liberalización del comercio hay promociones todo el año, ha hecho que el concepto natural de las rebajas se haya extinguido. “Una vez que el consumidor recupere la confianza, habría que plantear este tema”, explica. En cualquier caso, en estos días los hay también previsores y que prefieren evitar los atascos en coches y a la hora de pagar, por eso los incondicionales de las rebajas se lanzan a las compras a la hora de la sobremesa o recurren a internet, una opción que cada día gana más adeptos y que le permite anticiparse puesto que las ofertas estaban operativas el miércoles desde incluso antes de la media noche.
Consejos para salir airosos
Como todos los años, más vale prevenir que lamentar y la Junta lanza una serie de recomendaciones para que no nos den gato por liebre. Los consejos vienen desde Consejería de Salud, a través de la Dirección General de Consumo, desde donde recuerdan que los comercios que anuncian rebajas están obligados a aceptar los mismos medios de pago que admitan habitualmente y a facilitar la devolución del producto si así lo vienen haciendo el resto del año. También debe tenerse en cuenta que el establecimiento, al anunciar la venta en rebajas, está obligado a tener rebajados al menos la mitad de los artículos dispuestos para su venta y disponer de existencias en el periodo anunciado. Además, en su caso, en el interior del establecimiento deben diferenciarse claramente los artículos en rebajas de los que no lo están.
Por último, se recomienda que se pida siempre factura de las compras que realicen y que denuncien las prácticas o infracciones que les afecten. Se recuerda que todos los establecimientos están obligados a disponer de hojas de reclamaciones, y de su cartel anunciador. Según el Observatorio Cetelem, el importe medio que los españoles tienen pensado destinar a las compras de rebajas de este año ronda los 241€, lo que supone un 9% más que 2015 (221 €). Un importe excesivamente optimista teniendo en cuenta que muchos aún tienen que pagar lo que han financiado estos dos últimos meses en regalos.
