“Estamos todos muy nerviosos, pero no porque gane sino porque le salga bien, porque ya con llegar hasta donde ha llegado se le ha abierto una ventana muy grande para dedicarse a lo que le gusta. Ahora lo que queremos en casa es que le salga bonito”. José María Gil es el padre de Alba, la jerezana que este viernes puede convertirse en ‘La Voz’ de 2017 tras ser una de las cuatro finalistas del talent show musical de Telecinco y uno de los más populares del momento que vela por la música en directo. Él no podrá estar esta noche en el plató, pero si lo hará su madre, mientras el resto de la familia y amigos de la joven de 25 años se repartirán entre el centro cívico de La Granja, donde se podrá seguir el programa en una pantalla gigante y conectarán en directo desde Telecinco, y en Porzziones, una pizzería de la avenida de Lola Flores en la que Alba trabajaba, cuyo gerente la conoce “de toda la vida” de la barriada, pues los dos se criaron juntos en la calle Camarón de la Isla, muy cerca del establecimiento.
Tanto él como el resto de sus vecinos están “flipando” con el papel que está haciendo su amiga, aunque tampoco les sorprende que esté llegando tan lejos. “Es una pasada como canta, no teníamos ni idea hasta dónde iba a llegar y cada viernes nos reunimos aquí para verla”, explica Alejandro Cintado, que asegura que más que su jefe: es su amigo. Él y otros vecinos de la barriada tienen un grupo en WhatsApp desde el que están animando a Alba estos días. Hablan sus amigos “Desde la semifinal no ha bajado, se ha quedado en Madrid, le estamos mandando mensajes y animándola, pero ella ahora mismo no habla. Está muy liada”. Como el padre de Alba, lo que quieren es que le salga bien y aunque tienen claro que “por talento debería ganar ella”, no pierden de vista que “gana al que más le voten”, pero están tranquilos y convencidos de que de su participación en La Voz, independientemente de que gane o no, saldrá con trabajo “porque la está viendo mucha gente”. Si deseara volver al bar, su jefe lo tiene claro “la echo”, bromea, consciente de que es la gran oportunidad que tiene por delante esa vecina a la que rara vez la veían cantar en público exceptuando algunos días en karaokes. “Nunca se ha dejado ver. Es muy tímida. Yo la tuve que apuntar por mi cuenta y sin decirle nada a un concurso de música de Porzziones. Fue hace dos veranos, quedó segunda, ella trabajaba aquí entonces, pero la tuve que apuntar por mi cuenta porque le daba vergüenza”.
A partir de ahí, se dio cuenta que tenía que intentarlo en la música. Lo que pocos saben es que esta jerezana con solo 10 años ya fue al concurso de Eurojunior haciéndole los coros a María Isabel en la actuación con la que se proclamó ganadora de Eurojunior cuando tenía solo 10 años. Ahora, tras haber dejado la música para ser madre, tiene la oportunidad de cumplir su sueño, pero para ello hay que votarla llamando al número de teléfono 905 855112 o mandando sms GANAR ALBA al 27705 para que la ‘discípula’ de Manuel Carrasco se imponga a Samuel, Gabriel y Pedro.