Pese a que la delimitación de la Zona de Gran Afluencia Turística (ZGAT) de Málaga, más reducida que la propuesta por el Ayuntamiento, ya está publicada en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA), el Consistorio quiere seguir trabajando para alcanzar un consenso con el Gobierno regional, por lo que espera que ambas administraciones se reúnan para analizar las diferentes opciones. Ello sin descartar la posibilidad de recurrir a la vía judicial, algo que los técnicos competentes están estudiando.

   Así lo ha explicado este miércoles en rueda de prensa la delegada municipal de Promoción Empresarial y del Empleo, Esther Molina, quien ha señalado su intención de contactar con el responsable de Turismo y Comercio de la Junta en Málaga, Manuel García (IU), para que "nos diga qué le han parecido nuestras alegaciones porque no hemos tenido oportunidad de que nos lo digan por escrito" y para "volver a intentar el diálogo, aunque por el comportamiento mostrado, no tengo muchas esperanzas". 

   De hecho, a juicio de Molina, quien ha comparecido junto a representantes de consumidores, el planteamiento del Ejecutivo regional al rechazar el proyecto de ZGAT del Ayuntamiento, que incluía 1.200 comercios y cinco grandes superficies, "es absolutamente sectario, perjudicial para Málaga y obedece a criterios eminentemente políticos; no se piensa en la actividad comercial ni en el consumidor ni tampoco en todas las adhesiones que nuestro proyecto tiene".

   La delegada municipal contempla también sentarse con los colectivos que no se adhirieron a la propuesta municipal --acogida a los criterios establecidos en el Real Decreto-Ley 20/2012, ha precisado--, como es el caso de la Federación de Comercio de Málaga (Fecoma), para contar con su apoyo.

   Ha pedido, de igual modo, respeto a los colectivos que sí se adhirieron a esta propuesta, tales como la Cámara de Comercio y la Confederación de Empresarios de Málaga (CEM), a los que la Junta "no ha dado ni voz ni voto".

   Aunque ha apostado por seguir buscando el consenso, se ha mostrado sorprendida, "por un principio de lealtad institucional, de que, "después de haber tenido conversaciones iniciales y de haber trasladado por escrito nuestras alegaciones, la comunicación haya sido a través del Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA)".

   Ha destacado que la finalidad de crear una ZGAT ha de ser "fomentar la competitividad y provocar la modernización", al tiempo que ha defendido "la libertad empresarial". En este punto, se ha preguntado "por qué no se permite a un empresario decidir cómo quiere ejercer su actividad empresarial".

   "Lo contrario es dar marcha atrás, dar una imagen de ciudad cerrada", ha alertado, reiterando que "no se trata de abrir 365 días las 24 horas, es cuestión de decidir en función de tu producto y de tu cliente cómo y cuándo quieres abrir".

   De igual modo, Molina ha defendido que "una gran superficie lo que hace es dinamizar la zona y permite que no se pierda esa compra unida al ocio o por impulso". Más aún, ha dejado claro que "los enemigos del pequeño comercio no son las grandes superficies, sino las nuevas formas de negocio", en referencia especialmente a la compra online.

CONSUMIDORES

   En cuanto a los colectivos presentes en esta rueda de prensa, la Unión de Consumidores de Málaga, la Alianza para la Defensa de Consumidores y Usuarios Activos (Adecua) y la Asociación de Usuarios de Bancos, Cajas y Seguros (Adicae), han reiterado su rechazo a la decisión de la Junta sobre la ZGAT, ya que, en su opinión, "no cubrirá las demandas de los usuarios ni beneficiará la creación de empleo".

   En concreto, el presidente de la Unión de Consumidores de Málaga, Jesús Burgos, ha justificado el rechazo de su organización aludiendo a que "el ciudadano actual demanda practicar juntos ocio y consumo". También ha incidido en "el deterioro de la imagen del comercio y su consecuente pérdida de clientes", que "no benefician a los intentos por salir de la crisis".

   Asimismo, ha considerado "vital" que "sea el propio empresario el que decida cómo y cuándo puede y desea ejercer su actividad, siempre teniendo en cuenta las necesidades de los consumidores, que, evidentemente, no son las mismas que años atrás".

   Burgos ha lamentado que "la Junta olvide a las estaciones de ferrocarril y autobús, principales arterias de llegada de viajeros a la ciudad, así como a cuatro grandes superficies, que, además de dinamizar el comercio de la zona, están compuestas por franquicias y establecimientos regentados por pequeños y medianos comerciantes".

   Por todo ello, ha anunciado que su organización apoyará las próximas actuaciones que el Ayuntamiento decida llevar a cabo sobre la ZGAT, incluida una posible acción judicial, al tiempo que ha demandado estar presente en reuniones que pueda haber con el Gobierno autonómico.

   Por su parte, Christian Hofer, responsable de Adecua, ha señalado que la no liberalización del horario comercial en las zonas de afluencia turística "corresponde a un modelo económico del pasado", y ha opinado que "se da una imagen no adecuada" de la ciudad al turista, que, como ha advertido, "cuando está aquí un domingo va a comprar de todas formas, posiblemente a la venta ambulante".

   A su juicio, no contar con la liberalización de horarios comerciales implica "no aprovechar la creación de empleo, sobre todo el juvenil", añadiendo que en otras ciudades españolas y en otros países europeos "se ha demostrado que los comercios contratan a gente joven, a estudiantes, para trabajar los domingos porque no tienen compromisos familiares y les interesa trabajar ese día".

   La responsable de Adicae, Elisabeth Marín, ha alertado, por su parte, del problema que genera que cada Comunidad Autónoma aplique este decreto de una forma distinta, lo que hace que "haya discrepancias" entre los distintos consumidores en función de su lugar de residencia. Para esta organización, "el factor clave son los consumidores".

APERTURA DE COMERCIOS EN 2012

   Por otra parte, la delegada municipal de Promoción Empresarial y del Empleo ha hecho balance también de las acciones de apoyo al comercio malagueño desarrolladas a lo largo de 2012 y ha avanzado las principales líneas de actuación para este año.

   Ha recordado que el procedimiento de Declaración Responsable para la apertura de nuevos establecimientos, en cuya aplicación desde septiembre de 2011 el Ayuntamiento de Málaga fue pionero, ha simplificado los trámites administrativos y ha impulsado la actividad. Durante el pasado año se abrieron un total de 1.252 comercios; es decir, de las 2.566 aperturas totales de negocios, el 49 por ciento correspondió a este sector, una cifra 15 puntos superior a la registrada en 2008.

   A esta medida de apoyo al comercio hay que sumar otras como las ayudas directas otorgadas por el Área de Promoción Empresarial y del Empleo. En concreto, durante 2012 se realizaron acciones de este tipo valoradas en más de 101.120 euros.

   También ha hecho hincapié en proyectos como el Monedero Digital de Málaga (Momopocket), que permitirá utilizar el teléfono móvil como modo de pago en un centenar de comercios de la ciudad, así como en la creación de un Centro de Atracción de Inversiones.

   El comercio malagueño también se ha beneficiado de las subvenciones concedidas a emprendedores o empresarios. En concreto, estas ayudas, articuladas a través del Instituto Municipal para la Formación y el Empleo (IMFE), se han materializado en 1.140.000 euros y han hecho posible la creación de 512 puestos de trabajo.

   Finalmente, Molina ha marcado como objetivo para 2013 la definición y puesta en marcha de un plan que cree sinergias entre el comercio y el turismo.
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