Los detenidos son siete paquistaníes que, para no dejar rastro de la procedencia de su actividad ilícita, habrían realquilado las habitaciones del piso en el que realizaban esta actividad, en L’Hospitalet de Llobregat, para no constar así en el censo.
Esta operación llega después de que el jueves la Coalición de Creadores e Industrias de Contenidos Audiovisuales calificase de “vergüenza nacional” que el Caucus de Lucha contra la Piratería de Estados Unidos calificase de “alarmante” el nivel de descargas ilegales que hay en España.