Al menos 32 personas han muerto, entre ellas cuatro niños, por una serie de ataques cometidos contra musulmanes en el estado indio de Assam, en la parte noreste del país, que las autoridades atribuyen a separatistas bodos.
Además, las autoridades han informado del rescate de tres niños que se habían escondido en un bosque cercano y de la detención de 12 personas en Baksa por su relación con estos ataques, según ha informado 'The Times of India'.
La Policía sospecha de que los ataques podrían ser una respuesta a sus operaciones contra la insurgencia, en las que han muerto varios milicianos del Frente Democrático Nacional de Bodolandia (NDFB). Las tensiones han aumentado también por las elecciones y la presentación de candidatos de distintas comunidades.