Más de la mitad de los británicos votaría a favor de la permanencia del Reino Unido en la Unión Europea (UE), según revela un sondeo divulgado este sábado, mientras el primer ministro, David Cameron, busca acercar posturas con los líderes del bloque comunitario.
De acuerdo a la encuesta, elaborada por la firma ComRes para el tabloide "Daily Mail", y de la que este sábado se hacen eco otros medios británicos, un 54 % de los ciudadanos de este país es favorable actualmente a permanecer en la UE, frente a un 36 % que se opone y un 10 % de indecisos.
Para realizar la consulta, la firma entrevistó telefónicamente a 1.006 adultos entre el 22 y el 24 de enero.
El resultado se conoce cuando Cameron se encuentra inmerso en una ronda de conversaciones con dirigentes de la UE con la que esperar lograr cambios en Bruselas de cara al prometido referéndum de permanencia en la Unión, que se celebrará antes de que termine 2017.
El jefe del Ejecutivo británico viajó este viernes a Bruselas a fin de acercar posturas sobre sus propuestas de reforma, aunque no será hasta este lunes cuando esté sobre la mesa un borrador concreto para facilitar un acuerdo.
En su visita, Cameron se entrevistó con el presidente de la Comisión Europea (CE), Jean-Claude Juncker, y con el presidente del Parlamento Europeo (PE), Martin Schulz, y está previsto, además, que el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, se reúna mañana con el líder tory en Downing Street.
Entre las peticiones de Londres figura la de que los ciudadanos de otros países de la UE que lleguen al país tengan que vivir en el mismo y pagar impuestos durante cuatro años antes de poder optar a beneficios en el trabajo o a una vivienda social.
Tras la reunión con Juncker, Cameron calificó de "interesantes" las respuestas de Bruselas a sus peticiones de reforma en materia de inmigración, si bien dijo que queda "un largo camino por recorrer" en la negociación y las propuestas "no son suficientemente fuertes".
El primer ministro británico tiene previsto completar su ronda de contactos con un viaje a Hamburgo (Alemania) el próximo 12 de febrero, donde se reunirá con la canciller alemana, Angela Merkel.
Cameron quiere recabar el máximo de apoyos a su propuesta de reforma con vistas a llegar a un acuerdo con el resto de líderes europeos en la cumbre del Consejo Europeo del 18 al 19 de febrero.
Además de la citada petición de reforma en materia de inmigración -quizá el punto más polémico-, en sus negociaciones con la UE, Cameron busca que el Reino Unido y otros países que no forman parte de la moneda única tengan garantizado el acceso al mercado único.
También quiere que Londres quede eximido de una mayor integración europea y que la UE ponga énfasis en la competitividad.