Al menos 30 talibanes murieron tras la explosión por error de dos chalecos suicidas y munición durante una reunión en la que los insurgentes planeaban un ataque contra las fuerzas de seguridad en el oeste de Afganistán, informó una fuente oficial.
"Al menos 30 insurgentes talibanes han muerto después de que dos de sus chalecos y otra munición explotara en el distrito de Bala Bolok, en la provincia de Farah", indicó el portavoz del gobernador provincial, Naser Mehri, que no precisó el número de heridos por la detonación.
La fuente añadió que los insurgentes se encontraban reunidos ayer para planear un ataque contra las fuerzas de seguridad afganas y que entre los fallecidos se encuentran "algunos" comandantes talibanes.
El portavoz talibán Zabihullah Mujahid rechazó, sin embargo, en un mensaje en su cuenta de Twitter que se haya producido explosión alguna en la provincia de Farah.
En julio pasado los talibanes mataron a siete personas y secuestraron a otras seis en una carretera de esta demarcación provincial, una de las más inseguras del país.
La violencia en Afganistán se ha intensificado tras el final en enero de 2015 de la misión de combate de la OTAN, que continúa en el país con alrededor de 13.000 efectivos en tareas de asesoramiento y capacitación.
Según el último informe del Inspector Especial para Afganistán (SIGAR) de EEUU, la guerra de Afganistán continúa "estancada" con los talibanes controlando o con influencia en alrededor del 40 % del país.