Las lluvias dejadas por la borrasca Karlotta a su paso por la Península Ibérica el pasado fin de semana y las escorrentías posteriores han servido para que la presa portuguesa de Alqueva, la más grande de Europa Occidental, siga incrementando sus reservas, que ya superan con creces los 3.500 hm3, casi el doble que toda el agua embalsada por el conjunto de los pantanos de la cuenca hidrográfica del Guadalquivir en Andalucía.

El jueves 8 de febrero, el embalse luso que se nutre del río Guadiana almacenaba 3.434,96 hm3 de agua. Cuatro días después, tras las precipitaciones dejadas por la borrasca Karlotta, el volumen embalsado ascendía a 3.511,98 hm3, es decir 77,02 hm3 más, con lo que llegaba al 84,62% de su capacidad total, cifrada en 4.150 hm3.

Este importante incremento ha sido posible por la subida de caudal del río Guadiana, que pasó de entre 40 y 50 m3 por segundo en la estación de Monte da Vinha a una punta de 250 m3/segundo el 12 de febrero.

En el mismo periodo de tiempo, el conjunto de los embalses de la cuenca hidrográfica del Guadalquivir, la más importante de Andalucía, pasaron de 1.721,424 hm3 a 1.869,230 hm3: un incremento de las reservas en 147,806 hm3.

Esos 1.869,23 hm3 suponen el 23,27% de la capacidad total de los pantanos del Guadalquivir, estimada en 8.034,22 hm3.

Por su parte, los embalses de la cuenca del Tinto, Odiel y Piedras, en la provincia de Huelva, tenían almacenados el pasado 12 de febrero 173 hm3, tan sólo 11 hm3 más que en la semana previa.

ALQUEVA COMO SOLUCIÓN

El presidente de Caja Rural del Sur, José Luis García-Palacios, se ha sumado a las peticiones formuladas desde Andalucía, empezando por el Parlamento autonómico, para un trasvase desde la macro presa portuguesa. El financiero onubense considera que la única solución a corto plazo para paliar la sequía en la provincia de Huelva es inyectar agua de la presa portuguesa de Alqueva al sistema mientras se termina la de Alcolea, aunque ha reconocido que “ni siquiera depende de España, sino de Portugal”.

 

García Palacios, durante su participación en el programa Acento Andaluz, ha expresado que ante la situación de sequía y obras que ni siquiera han empezado, como el desdoble del túnel de San Silvestre, “no podemos quedarnos esperando a ver quién se lleva el gato al agua”. Es -ha afirmado- una “espada de Damocles sobre la provincia de Huelva, muy peligrosa”. Y apuntado que “soluciones a corto plazo hay una y no depende siquiera de España sino del país vecino, de Portugal”, en referencia a la presa de Alqueva.

“Me ha tocado a mí también liderar ese grupo que reivindique y reclame el aprovechamiento de esas aguas que van al mar, a través del Guadiana y que desemboca en Ayamonte”, aseveró, unas aguas que son internacionales y que se regulan mediante el Convenio de Albufeira que “dentro de poco cumple sus bodas de plata”.

“La idea es aprovechar una serie de hectómetros cúbicos, que podrían inyectarse en el sistema de regadíos de Huelva, y paulatinamente y de manera paliativa, mientras se termina de hacer la presa del Alcolea, que consumiría varios años, y podríamos seguir manteniendo la viabilidad y la esperanza de poder seguir produciendo alimentos, nada más y nada menos”, explicó García-Palacios.