Sevilla acogerá en abril un simulacro de terremoto a nivel 3 coordinado por la Unidad Militar de Emergencias (UME) y en el que participarán casi 3.500 personas, entre efectivos de la UME, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y del Grupo Asesor Internacional de Operaciones de Búsqueda y Rescate (Insarag).
El delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, ha mantenido una reunión acompañado de la subdelegada del Gobierno de Sevilla, Felisa Panadero, con el teniente general jefe de la Unidad Militar de Emergencia, Miguel Alcañiz, y el teniente coronel jefe del Batallón de la UME en Morón, Isaac López, para analizar los detalles del Ejercicio Gamma Sur 2016 de emergencia sísmica.
Ha agradecido a la Unidad Militar de Emergencias "haber elegido Andalucía y Sevilla" del 4 al 8 de abril para desarrollar el ejercicio más importante a nivel nacional" en materia de prevención y seguridad, según informa la Delegación del Gobierno en un comunicado.
"Para la Delegación del Gobierno es un honor formar parte del Consejo de Dirección del ejercicio", ha agregado Sanz, quien ha precisado que el principal objetivo del simulacro es la "integración, coordinación y el trabajo conjunto de todos los organismos intervinientes".
Por su parte, el teniente general jefe de la UME, Miguel Alcañiz, ha explicado que en el ejercicio, que afectaría a la capital andaluza y a la ciudad autónoma de Ceuta, se simulará una emergencia de gran nivel, o nivel 3, en la que participarán casi 3.500 personas, entre militares, tanto de la UME como de otras unidades y de otros países, como civiles de otras organizaciones encuadradas dentro del sistema nacional de Protección Civil, con las que habitualmente trabaja esta unidad especializada en emergencias.
"Se trata del ejercicio más importante a nivel nacional que realiza la UME anualmente, que el año pasado tuvo lugar en torno a la localidad manchega de Daimiel y que en 2016 vamos a desarrollar en la zona norte de Sevilla", ha agregado Alcañiz.
Asimismo, ha explicado que este ejercicio busca la intervención de aquellas capacidades que se consideran fundamentales en la gestión de una catástrofe real provocada por un seísmo, destacando entre otras, búsqueda y rescate; riesgos medioambientales y tecnológicos; atención a damnificados; restablecimientos de infraestructuras; mando y control; atención y evacuación sanitaria, seguridad y orden Público y apoyo logístico.
Sanz ha tenido una mención especial para el batallón de la UME de la base aérea de Morón de la Frontera, con más de 300 intervenciones a sus espaldas, y "que acaba de celebrar, el pasado 7 de octubre de 2015, su décimo aniversario, siendo ya una de las unidades referencia a nivel nacional e internacional, pues son ya varios países los que se han interesado por el modelo".