Alberto Comesaña presenta Shock, una canción que pretende concienciar a la población de los peligros de utilizar los dispositivos móviles de una forma compulsiva, que trae consecuencias muy desagradables.
El ex de Semen Up y Amistades Peligrosas, que vuelve al ruedo musical después de quince años, contestó a las preguntas de Viva Sevilla.
Aunque no ha dejado de trabajar en este tiempo, ¿se puede decir que Shock es una vuelta al ruedo musical?
–Es una vuelta al ruedo musical sin ninguna duda. Hacía 15 años que no tenía compañía discográfica. Es volver a saborear lo que es una promoción, un contrato discográfico. Nunca he dejado de trabajar, lo que pasa es que he estado dedicado al tema del directo.
Presenta ‘Shock’. ¿Qué nos cuenta en este nuevo trabajo?
–Shock es una canción en la que creo que hemos alcanzado la excelencia, la matrícula de honor. Es una denuncia del uso que estamos haciendo de las nuevas tecnologías y los dispositivos móviles, que por ejemplo, para los conductores representa la primera causa de muerte. La DGT nos está apoyando y compartiendo el ví deo. Siempre intento que mis canciones lleven un mensaje potente, que sirva para que la gente se conciencie.
En esta nueva etapa, ¿sigue la misma línea argumental que seguía con Amistades Peligrosas a la hora de componer?
–Sigo la línea argumental de toda mi vida, yo compongo de una manera muy particular. Al no ser músico me centro mucho en las letras y las melodías. Empecé con Semen Up cuando hacía falta una apertura en el tema sexual. Con Amistades Peligrosas tocamos las relaciones de pareja y algún tema político como la causa de los africanos en Madrid, el aborto, la eutanasia. Ahora he detectado el abuso de los móviles en primera, segunda y tercera persona, por lo que creo que merece la pena dedicarle tiempo a reflexionar sobre esto.
¿Qué cambios, a la hora de diseñar su trabajo, han sido necesarios para adaptarse a los nuevos tiempos y tecnologías?
–Los cambios son todos, yo empecé hace 35 años, ahora esto es una profesión distinta, no tiene nada que ver. Las necesidades y los objetivos de los artistas nada tienen que ver con lo de ahora. Prácticamente el único camino que existe son las redes sociales y la promoción ha cambiado totalmente. Es un ejercicio diario de superación, como si aprendieras a escribir con la mano izquierda. Venimos del mundo analógico así que o te adaptas o desapareces.
Hay quien ha calificado el videoclip de la canción como escalofriante. ¿Qué nos puede contar de este trabajo audiovisual?
–Está grabado en plena Gran Vía de Madrid, vestido con harapos y sucio, intentando dar la imagen de un zombie, para representar lo que yo creo que es el zombie del móvil, que es aquella persona que vaga por las calles solo, pendiente de su dispositivo, sin prestar atención a lo que ocurre a su alrededor. Puede dar algo de miedo, pero es una sensación que de alguna manera todos estamos sintiendo día a día en las calles. Lo que hemos querido expresar es que hay gente que tiene accidentes por esta causa. Algunos son atropellados e incluso se caen a las vías del tren. Como anécdota te contaré que el día que lo grabamos hubo mucha gente que ni se percató de que estábamos grabando un vídeo ni de cómo íbamos vestidos.
