Agentes de la Guardia Civil han detenido a un vecino de 43 años de la comarca de Béjar (Salamanca) por ocultar en cajas fuertes y en distintos espacios de su casa un total de 121 armas de fuego, tanto largas como cortas, desde un fusil de asalto 'AK-47' y dos 'Cetme' hasta revólveres, algunas de ellas preparadas para disparar, y más de 1.000 cartuchos de munición.
Para su posesión, el autor de los hechos --con licencia de armas, que ahora se revisará para su posible retirada-- se movía con siete apodos diferentes por toda España en la compra y venta de armas, con el propósito de ampliar su colección ilegal, e incluso mantenía contactos para las adquisiciones con traficantes ilegales a nivel internacional.
Entre el arsenal encontrado en el registro efectuado el 18 de marzo, con una valoración económica difícil de cuantificar por los precios que se pagan en el mercado negro, estaba también armamento de la Guerra de Cuba o de la I Guerra Mundial, incluso un arma de un general nazi y serie limitada, valorada por sí sola en más de 20.000 euros.
Según ha explicado el teniente de la Guardia Civil, Enrique Miguel, la 'Operación Abraxas' comenzó en 2014 y han sido necesarios cinco años de investigación para sorprender ahora al detenido, quien ha pasado a disposición judicial y está en libertad condicional.
En cuanto a la incautación, la más elevada en la historia de la Benemérita en Salamanca, las armas están siendo analizadas por expertos para comprobar cada una de ellas, con el propósito de ver si están preparadas para abrir fuego y si fueron utilizadas previamente en algún delito.
En el momento del registro, los agentes se encontraron con un revólver que estaba siendo modificado, tanto el tambor como el cañón, con el propósito de hacerlo apto de nuevo para el disparo de proyectiles.
En concreto, tras siete horas de búsqueda en la casa, el operativo acumuló la incautación de 17 armas de fuego largas, activas y legalizadas; 37 armas de fuego largas inutilizadas y legalizadas; 30 armas de fuego largas ilegales, nueve de ellas preparadas para su uso; 20 armas cortas, todas activas e ilegales; 17 de aire comprimido y detonadoras; 40 bayonetas y machetes; y 1.000 cartuchos metálicos, además de material y herramientas para la recarga.