En la sesión, y en el contexto del debate presupuestario, ocupó también lugar de reiterada referencia la deuda del Ayuntamiento de Torremolinos con el Ayuntamiento de Málaga que, a juicio de la oposición, debería formar ya parte sustancial de los Presupuestos.
Al respecto, Pedro Fernández Montes dejó claro en principio que “es una deuda socialista”. Y explicó que, generada “entre el Partido Socialista de Torremolinos y el Partido Socialista de Málaga, éste presentó de forma indecente unas cuentas de Gastos en Torremolinos olvidándose de los Ingresos que, como todos sabemos, ya eran superiores, cosa que todo el mundo sabía y que quedó demostrado en el Expediente de Segregación”.
El alcalde detalló que “para que Torremolinos consiguiera su independencia tenía que ser económicamente autosuficiente y los propios técnicos de la Junta de Andalucía ratificaron que Torremolinos tenía suficientes ingresos para gobernarse a sí mismo”, y añadió que “el Partido Socialista de Torremolinos, cogobernando con IU, tampoco supo defender, una vez más, los intereses de nuestro pueblo y ahora, en lugar de agachar la cabeza y guardar un prudente silencio, sólo están interesados en que se reconozca esa deuda, que se pague esa deuda, para que el Equipo de Gobierno tenga menos dinero y pueda hacer menos cosas…, sin importarles un comino los intereses de los vecinos…”.
Para dar por cerrado este asunto, el primer edil afirmó que, “si en el año 1991 en Partido Socialista de Torremolinos, gobernando, no supo defender los intereses de nuestro pueblo (averigüe usted si no quiso), ahora, sinceramente, creo que por vergüenza deberían callar y no reclamar con tanta insistencia que se le pague a Málaga la deuda. Pero –concluyó-, les voy a anticipar algo: En este asunto aún no se ha dicho la última palabra. Por eso no queda recogida ninguna obligación de pago en estos Presupuestos…”.