El jurado del juicio contra Jorge Ignacio Palma, acusado de la muerte de la desaparecida Marta Calvo, de Arliene Ramos y Lady Marcela Vargas, y de abuso sexual a siete mujeres más, ha recibido este lunes 150 folios con las 700 preguntas que tendrán que responder para emitir su veredicto.

La presidenta del Tribunal ha trasladado al jurado popular el objeto del veredicto, que ha dividido en diez casos diferentes y en el que pregunta qué hechos se consideran probados o no, durante la última vista pública de un juicio que comenzó el pasado 13 de junio y que se ha celebrado a lo largo de 23 jornadas.

La magistrada ha admitido que este no ha sido un juicio con jurado "normal", pues en los "muchísimos años" que lleva de carrera nunca ha visto, ni propio ni ajeno, uno "tan complejo como este", en el que se acusa al encausado de más de 30 delitos y en cada uno de los cuales pueden concurrir o no circunstancias agravantes o atenuantes.

Tras recibir las instrucciones de la presidenta del Tribunal -como que no se juzga a la persona sino los hechos, y si estos están probados o no por las pruebas que se han vertido en el juicio-, el jurado, formado por siete mujeres y dos hombres, va a quedar confinado en un hotel para proceder a las deliberaciones.

Durante la vista pública, que ha durado 50 minutos, en la que ha estado presente el acusado y cuyo inicio se ha retrasado porque las partes han hecho aportaciones a la propuesta inicial de objeto de veredicto de la presidenta del Tribunal, esta ha recomendado "prudencia y sentido común" al jurado.

La presidenta del Tribunal ha expuesto al jurado que todas las acusaciones son "por hechos muy graves, algunos complejísimos de enjuiciar", ya que se trata de delitos de asesinato u homicidio, contra la libertad sexual de una decena de mujeres, contra la integridad moral de los padres de Marta Calvo y contra la salud pública.

Les ha instado a olvidarse de creencias, tendencias, simpatías o antipatías, o de si el acusado es "un santo varón o un monstruo" o de si lo son las víctimas, y ha resaltado que el "rigor probatorio" es la principal herramienta del juez y del jurado, mientras que la presunción de inocencia es la principal herramienta de la justicia.

"Pruebas, pruebas, pruebas, pruebas", les ha insistido la magistrada, quien tras explicarles las reglas de deliberación y votación y la forma de reflejar el veredicto ha pedido al jurado que "no se desmoralice" por la extensión del veredicto, pues aunque es "cierto" que es "muy extenso" casi todos los hechos por los que se acusa al encausado son "muy parecidos".

Así, ha detallado que el objeto del veredicto consta de tres partes, pero las preguntas son las mismas, por lo que en cuanto tengan resuelta la primera será "más fácil" seguir con las deliberaciones, porque es "muy sistemático", y les ha aconsejado que vayan "caso por caso" y tengan en cuenta "la totalidad" de las pruebas del juicio.

La magistrada ha asegurado al jurado que "siempre lo harán bien" y que el resultado del juicio será en todo caso responsabilidad de ella y de los operadores jurídicos que han participado, y les ha dado las gracias por su "paciencia y responsabilidad" en estos "largos días" de juicio.

A la salida de la vista, el abogado Juan Carlos Navarro, que representa a varias de las víctimas, ha afirmado que es el objeto de veredicto es "extenso, pero no complicado", por lo que aunque es el más amplio que ha visto en su carrera y no le constan antecedentes en España de uno así, al ser "repetitivo" en las preguntas el miércoles o jueves puede estar el veredicto.

El abogado de una de las víctimas, Vicente Escribano, sí ha considerado que el objeto de veredicto es "complicado" y ha dicho que el jurado tiene una misión "ardua", ya que las partes han presentado muchas cuestiones, y ha rehusado aventurar cuándo estará un veredicto en el que hay que responder 700 preguntas.