Es conocido por todos el sabor y la calidad de los garbanzos de Naveros. La tierra que rodea a esta pedanía vejeriega y el buen hacer de los labriegos locales hacen de esta leguminosa un auténtico manjar que todos los años se hace esperar para ser degustado por los paladares locales y foráneos. Son hasta ocho los agricultores de esta pedanía los que están especializados en el cultivo del garbanzo y entre todos ellos cosechan unos 70.000 kilos.
Desde esta misma semana, ya están disponibles los primeros garbanzos para ser adquiridos en la pedanía.
Este año, la cosecha se ha adelantado dos semanas debido a la climatología. Este año hídrico se ha definido por ser un año seco y, aunque el garbanzo, como dicen los agricultores, “no quiere mucha agua” siempre se cría mejor con “jugo” en la tierra.
A pesar de todo, sin ser un año excepcional, la producción se ha mantenido en la media, tanto de cantidad como de calidad, ya que el calibre, la textura y la cocción del garbanzo navereño vuelven a ser óptimos, consiguiendo un producto equilibrado y exquisito para todo tipo de guisos.
La preparación del producto es casi artesanal, salvando las cosechadoras en pleno campo, posteriormente las familias se dedican manualmente a seleccionarlos y “limpiarlos”, eliminando todas las impurezas posibles, añadiendo un valor añadido al producto que sólo el cariño de quienes hacen tan meticuloso trabajo podría aportar.
Recordamos que además de la calidad que ampara el Garbanzo criado en Naveros y su entorno, dadas las cualidades del suelo, franco arcilloso, así como el empeño y buen hacer de sus agricultores, el garbanzo como alimento es de una riqueza formidable en lo que a aportes nutritivos se refiere. Es rico en proteínas, en almidón y en lípidos (más que las otras legumbres) sobre todo de ácido oleico y linoleico, que son insaturados y carentes de colesterol. Del mismo modo el garbanzo es un buen aporte de fibra y calorías.
Finalmente, cabe señalar que, tan integrado está este producto en el sentir de Los Naveros que hasta se le dedica su particular Running Garbanzos de Naveros, que en el 2024 cumplirá su quinta edición y que cuenta con su propia sintonía musical y mascota, convirtiendo a la pedanía vejeriega en foco provincial a nivel deportivo, gastronómico y social.