La conmemoración del fracaso del golpe de Estado de 1981 fue acordada a principios de mes por la Junta de Portavoces del Congreso a instancias del presidente de la Cámara, José Bono.
Así, después de la habitual sesión de control al Gobierno de los miércoles por la mañana, Bono ofrecerá un almuerzo, al que asistirán don Juan Carlos y Zapatero, junto a los líderes políticos más destacados de hace treinta años.
Ya han confirmado su asistencia al almuerzo, que se celebrará en el comedor de gala de la Cámara, el que era presidente del Congreso en esa fecha, Landelino Lavilla; el ex jefe del Gobierno Felipe González; los ponentes constitucionales Manuel Fraga y Miquel Roca; el entonces secretario general del PCE, Santiago Carrillo, y el portavoz parlamentario del PNV en 1981, Marcos Vizcaya.
Tras la comida, alrededor de 150 diputados de la primera legislatura, que fueron testigos directos de la intentona golpista, se darán cita de nuevo en el Congreso para rememorar aquellas 18 horas en las que permanecieron secuestrados.
Junto a ellos, medio centenar de periodistas que estaban aquel día en la Cámara.
Una vez finalizado el acto, que incluirá unas palabras del presidente del Congreso, los asistentes se harán una foto de familia en la escalinata de Palacio de las Cortes.