Agentes de la Policía Nacional han detenido al director de una sucursal de la capital, D.T.A., de 33 años de edad, acusado de un presunto delito de estafa por haberse apropiado de 80.000 euros de un cliente que había contratado un producto financiero para colocar 180.000 euros a plazo fijo.
Según informa la Policía Nacional en una nota, el ahora detenido, al descubrirse el hecho ilícito y ser llamado por los auditores de la entidad bancaria para que diese las explicaciones oportunas, no dudó en manifestarles que fue la víctima la que le había prestado el dinero "para la adquisición de una vivienda".
Los hechos se iniciaron en noviembre cuando la víctima contrató un depósito a plazo fijo por importe de 180.000 euros en una sucursal de una entidad bancaria de Jaén. Para ello, presuntamente fue atendido personalmente por el director de la misma, a quien preguntó "si este depósito era seguro, recibiendo por respuesta que era totalmente seguro dado que el que avala este tipo de operaciones es el Estado".
Entrado el mes de diciembre, el director de la sucursal le llamó telefónicamente con la excusa de proponerle un nuevo producto, quedando para ello en la sucursal fuera de horario de oficina. Una vez en ella, le manifestó que lo consideraba "una buena persona y le trataba como si de su misma familia se tratase".
Por ello, manifestó que "se había tomado la libertad de realizar un pagaré aval bancario por un importe de 80.000 mil euros a un plazo de seis meses, por el que cobraría mensualmente más de 600 euros los días 1 de cada mes, convenciéndole de que era una operación única, asegurando los 180.000 euros en total".
Serían "cien mil euros asegurados por el FROB y los 80.000 restantes los avalaba la propia entidad bancaria". Por todo ello, el detenido hizo entrega de un pagaré debidamente firmado y sellado por un importe de 80.000 euros, proponiéndole a la víctima que, por motivos de seguridad, dicho pagaré "lo dejara en depósito en la caja fuerte del banco", si bien le entregó una fotocopia compulsada del mismo.
Pasado el tiempo, en especial al cumplir el primer abono de los intereses, la víctima detectó una serie de irregularidades en los productos contratados, concretamente en los conceptos del plazo e interés, haciéndole sospechar que podía haber sido engañado; por lo que se personó en la oficina con el fin de retirar los 80.000 euros con la fotocopia compulsada del documento original que le había entregado el director que había destinado a otra oficina.
Al intentar cobrar el pagaré, la cajera de la sucursal le manifestó que dicho documento "no tenía ninguna validez" y que la cuenta que figuraba en el mismo no correspondía a la entidad bancaria sino "a una cuenta particular, concretamente a la del antiguo director". Ante esta situación, la víctima fue atendida por el nuevo director que le manifestó que había dado cuenta de estos hechos a sus superiores, que se había abierto un investigación interna y que no sabía dónde estaban sus 80.000 euros.
Tras ello, los agentes de la UDEV de Jaén comenzaron sus investigaciones al tener conocimiento de los hechos, descubriendo la "compleja y estudiada trama" que tenía tejida el detenido, que no dudó en manifestar a sus superiores "que fue la víctima la que le había dejado prestado el dinero para la compra de una vivienda y que como garantía de pago le firmó un pagaré de su cuenta corriente".