La Diputación de Jaén dice respetar la decisión del Ayuntamiento de la capital para acudir a un nuevo sistema de gestión de las multas de tráfico y zona azul, aunque desconfía de que el Ayuntamiento obtenga mayor eficacia que la que le venía prestando la Administración provincial desde 2009, y para el que destinaba en exclusiva nueve trabajadores de Diputación.
La vicepresidenta, Pilar Parra, dijo que la Diputación siempre respeta la autonomía local, para los que pretende “ser un instrumento útil” poniendo a su servicio una serie de prestaciones por los que “libremente pueden optar”. Parra defendió que el Servicio Provincial de Recaudación, que gestiona estas multas a 56 ayuntamientos de la provincia, ofrece una eficacia “muy alta, posiblemente de un 70% de recaudación.
Por su parte, el portavoz de Izquierda Unida en el Ayuntamiento, Pablo Foche, criticó la “privatización encubierta” del servicio de gestión de multas de tráfico y defendió que este servicio “debe ser gestionado íntegramente por los trabajadores municipales y quedar en la esfera de la gestión pública”.
La concejal socialista Matilde Cruz cree la medida no garantiza una recaudación más allá del 25 por ciento frente al casi cien por cien de efectividad" de Diputación.