La Policía Local de Guillena (Sevilla) puede ser desahuciada del local que tiene como jefatura por la propietaria del inmueble, una entidad bancaria que lo adquirió en 2012 tras quebrar la empresa propietaria de los mismos.
Fuentes municipales han indicado que ya el pasado viernes un cerrajero se personó en las instalaciones, unos locales donde se encuentra también el juzgado de paz de la localidad, que pertenecían hasta 2012 a la sociedad municipal Diprasa, que tuvo que cerrar al no poder afrontar una deuda de unos 26 millones de euros.
Al no ser locales habitados no se ha podido ejecutar una orden judicial, aunque sí se ha cambiado la cerradura del número 4 de la calle Echegaray, donde se encuentra la jefatura, mientras el Ayuntamiento está gestionando una solución de urgencia a este caso.
Las fuentes han indicado que el banco mandó a cambiar las cerraduras desde sus sedes centrales pensando que los locales no tenían uso, aunque al menos tres de ellos si se utilizan.
Uno de los policías de servicio ha indicado a Efe que cuando estaban trabajando el pasado viernes entró una persona en el cuartelillo que se identificó como un cerrajero que buscaba una dirección en concreto, con el resultado de que era el mismo cuartelillo el que tenía que ser objeto de su trabajo.
El operario informó a su jefe de que lo que tenía que hacer era cambiar la cerradura del cuartelillo de la Policía, por lo que le indicaron que esperase a hoy para consultar qué debía hacer, sin que hasta el momento se haya llevado a cabo la orden.
Si se llega a cabo el desahucio, sería el primer cuerpo policial de los 9.000 municipios españoles en quedarse sin sede por este motivo.