El Gobierno andaluz ha insistido este martes en que la solución para el derribo del hotel Algarrobico es la nulidad de la licencia urbanística por parte del Ayuntamiento de Carboneras, cumpliendo una orden judicial, y no la expropiación porque sería motivo de recursos y el proceso "se podría eternizar".
En la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Gobierno, la portavoz del Ejecutivo, Carolina España, se ha referido de esta forma a la decisión este martes del Consejo de Ministros de dar luz verde al inicio del proceso para expropiar parte de los terrenos donde se ubica el hotel El Algarrobico de Carboneras (Almería), cuyo plan de derribo permitirá recuperar el paraje natural del Cabo de Gata, según el Gobierno.
España, que ha añadido que el anuncio de la decisión del Gobierno central supone una "falta de lealtad" no solo hacia la Junta sino al propio Gobierno central, puesto que en marzo de 2024 ambas administraciones coincidieron en la comisión mixta en que la solución pasaba por la nulidad de la licencia urbanística.
El convenio firmado en 2011 entre ambas administraciones definía las responsabilidades de cada una, según ha dicho la portavoz, quien ha recordado que el Gobierno es el encargado de derribar la mole construida y la Junta de gestionar los residuos que se produzcan una vez que se realice el derribo.
"¿Por qué cambia ahora al método de la expropiación?", se ha preguntado España, quien ha recordado que en 2009 "se dejó morir" la solución de la expropiación que se planteó por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, y se insistió en que la "vía mas idónea" era la de la nulidad de la licencia por parte del Ayuntamiento de Carboneras.
Tras advertir de que se trata de "una vuelta al pasado" y que desde Andalucía no se entiende este cambio de opinión, la también consejera de Economía y Hacienda ha insistido en que un procedimiento de expropiación es "susceptible de recurso y esto se puede judicializar de forma eterna".
Ha insistido en ofrecer "toda la colaboración institucional" y ha pedido al Gobierno que informe "cuándo llegarán las excavadoras" para proceder a la demolición, tras lo que ha espetado: "ya está bien de marear la perdiz y poner cortinas de humo" en un asunto sobre el que ambas administraciones coincidieron en que lo idóneo era la nulidad de licencia.
"Pedimos que dejen de enredar y que nos digan el día y la hora en que llegarán las excavadoras", ha subrayado la consejera, quien ha insistido en que la culpa de que esta situación siga así es del gobierno socialista en Carboneras y en la Junta, y la expropiación "no es la solución".
Según España, el Ayuntamiento de Carboneras tiene que "cumplir" lo que dictaminó la Justicia y lo que se acordó en la comisión mixta entre ambas administraciones en marzo de 2024 y que pasa por la nulidad de la licencia urbanística, de forma que la "única" que ha cambiado ha sido la vicepresidenta del Gobierno, María Jesús Montero, cuando anunció ayer esta expropiación "en contra del criterio de su propio gobierno".