El central Diego Mainz pondrá fin el próximo sábado ante el Barcelona a siete temporadas como jugador del Granada, equipo en el que es el único jugador que queda de los que llegaron de la mano del presidente Enrique Pina en 2009.
Mainz, de 33 años, acaba contrato al final de esta temporada y fue el primer fichaje que hicieron Pina y su director deportivo, Juan Carlos Cordero, cuando se hicieron cargo del Granada en el verano del 2009, cuando los granadinistas militaban en Segunda B.
Tras la marcha el pasado verano del lateral francés Allan Nyom al Watford inglés, el central madrileño es el único jugador que se mantiene en el Granada desde la llegada del dirigente murciano al club.
Mainz fue pieza clave en los dos ascensos del Granada desde Segunda B hasta Primera y en todas las permanencias del equipo en la máxima categoría, siendo la presente temporada en la que menos encuentros ha disputado.
En estas siete temporadas, el actual capitán rojiblanco ha alcanzado los 170 partidos disputados con el Granada, casi cien de ellos en Primera División, y marcado un total de quince goles, cinco de ellos en la máxima categoría.
Unas molestias en una rodilla han impedido que Mainz haya estado disponible en los últimos partidos, aunque el jugador lleva varios días trabajando para poder jugar algunos minutos contra el Barcelona y despedirse como rojiblanco sobre el terreno de juego del Estadio Nuevo Los Cármenes, informaron fuentes del club.