La Delegación Territorial de Cultura, Turismo y Deporte y el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil han reafirmado su compromiso de colaboración para la protección del patrimonio histórico de la provincia de Huelva.
Concretamente, el pasado año se iniciaron 27 actuaciones en ámbito sancionador, penal y de exigencia del deber de conservación, dentro del Servicio de Bienes Culturales de la Delegación territorial.
De ellos, 12 fueron expedientes sancionadores administrativos, todos ellos concluidos con sanciones firmes, 13 actuaciones previas, la mayoría en activo con exigencia del deber de conservación y dos actuaciones previas remitidas al juzgado, ha informado la Junta en una nota.
En la reunión mantenida recientemente entre la delegada territorial, Natalia Santos; el teniente jefe del Seprona en Huelva, Gregorio Antonio Salgado, y el sargento de Comandancia de la Guardia Civil de Huelva, Sebastián Contreras, se ha realizado balance de las actuaciones llevadas a cabo en 2017.
Entre las principales actuaciones desde 2016, fruto de la colaboración entre el Servicio de Bienes Culturales y el Seprona, se encuentra la de la Ciudad Hispanorromana de Turóbriga en Aroche donde, tras la denuncia de la arqueóloga municipal en diciembre de 2016, se constató que se habían producido diversos movimientos de tierra realizados con azadones. En concreto se realizaron una serie de agujeros de distintas extensiones y profundidades localizados al este del camino principal del yacimiento.
En enero de 2017 se inspeccionó el Paraje de la Morañina en Bollullos Par del Condado, tras el aviso de un vecino de la zona alertando de la aparición de una gran cantidad de elementos cerámicos y constructivos tras el arado de la zona. Derivado de este hallazgo casual, se realizó una prospección y excavación arqueológicas que puso de manifiesto un importante asentamiento medieval islámico.
En abril de ese mismo año, se efectuó una visita de inspección a la Fuente Vieja de Huelva para comprobar el resultado de los actos vandálicos que afectaron a la parte moderna de esta infraestructura, observándose principalmente una serie de daños en el canal de drenaje exterior, así como la sustracción del cerramiento.
Ya en noviembre, se comunicó a la Delegación la realización de movimientos de tierra con maquinaria en la zona del yacimiento arqueológico Los Bogeos en Bonares, tras realizar la visita de inspección junto al Seprona y constatar las obras de realización de una canalización de riego sin los permisos pertinentes. Además, desde finales del pasado año se vigila y protege los restos arqueológicos aparecidos cerca del yacimiento subacuático de Matagrana en la playa de El Rompido.
Por último, a principios de este año y tras la denuncia del director de la excavación arqueológica de Cortalago en Minas de Riotinto, en zona declarada Bien de Interés Cultural (BIC), se puedo comprobar la realización de medio centenar de agujeros por todo el yacimiento. La pérdida del registro arqueológico en este contexto y en un yacimiento Bien de Interés Cultural supone una infracción muy grave contra el patrimonio histórico, siendo una de las prioridades de los investigadores del Seprona.
INVESTIGACIÓN Y VIGILANCIA
La larga trayectoria de cooperación de la Delegación Territorial de Cultura, Turismo y Deporte, con la Guardia Civil redunda en un mejor trabajo de los servicios técnicos de la misma, ya que las patrullas del Seprona suponen un gran apoyo logístico en las tareas de protección del patrimonio histórico, no solo en la investigación de los delitos contra el mismo, sino también en la vigilancia constante en los ámbitos rurales con yacimientos arqueológicos, así como del uso indebido de los detectores de metales.
La colaboración se realiza fundamentalmente en tareas de protección frente al expolio, pero también se trabaja en tareas de vigilancia con las patrullas de la provincia, en dos líneas principales: tras la realización de hallazgos casuales en trabajos agrícolas o en yacimientos catalogados en ámbitos sensibles como son las playas.