COAG lamentó que la Comisión “da la espalda” a las principales regionales productoras de frutas y hortalizas, un sector con una clara vocación exportadora hacia el resto de Europa.
A su juicio, el Ejecutivo comunitario “hace oídos sordos” al planteamiento del Gobierno español, que ha manifestado su apoyo al proyecto de Corredor Mediterráneo.