Declaraciones de acusados y testigos, expedientes de desahucios, atestados de accidentes e incluso fotografías de un presunto delito de malos tratos a una menor son algunas de las perlas que se pueden encontrar en el contenedor de la calle Tomás del Valle, frente al Palacio de Justicia.
Se trata de documentos que en vez de ser archivados o bien destruidos si no tienen ya interés legal, se exhiben ahora con nombres y apellidos de las personas involucradas, incluidos presuntos violadores “leves” cuyo resultado final se desconoce. Sin que falten las copias de conversaciones de WhatsApp como pruebas de la comisión de un posible delito.
El motivo es el desalojo de los Juzgados una vez que van a ser trasladados esta misma semana, sin que nadie haya caído en la cuenta de que se está tirando a la basura y poniendo al alcance de cualquiera datos personales de todo tipo, incluidas huellas digitales. Los propios vecinos han mostrado se enérgica protesta por lo que ha ocurrido.